La productividad de la empresa aumenta. Cada individuo se enfoca en lo que mejor sabe hacer: su especialidad. Cada uno maximiza su potencial. No tiene que preocuparse por una tarea que no domina porque sabe que cuenta con el conocimiento y el apoyo de sus compañeros.
Hay muchos “jefes” que todavía hoy en día, en pleno siglo XXI, se preguntan cuáles son los beneficios de incentivar el trabajo en equipo para sus empresas. De hecho, algunos incentivan el individualismo y la competencia a un punto que no es saludable.
Una de las características principales de aquellas empresas con un alto nivel de desempeño es, precisamente, un buen trabajo en equipo. Las ventajas del trabajo en equipo son muchas e incuestionables.
Aquí les cuento.
El principal valor de las empresas es su capital humano, o sea, sus colaboradores. El trabajar en equipo incrementa el sentido de la responsabilidad de cada miembro; les permite entender mejor la perspectiva de los demás; complementa las fortalezas de cada uno creando un producto final que no habría podido conseguirse de manera individual; se toman mejores ideas y decisiones; se facilita la implementación de nuevas ideas, y aumenta la posibilidad de diseñar e implementar buenas estrategias.
Además, el trabajo en equipo promueve la lealtad, la fidelización y el compromiso entre los mismos colaboradores. Los empodera. Se producen mucho menos errores, y cuando estos ocurren, la acción del grupo facilita su detección y la corrección de los mismos.
La productividad de la empresa aumenta. Cada individuo se enfoca en lo que mejor sabe hacer: su especialidad. Cada uno maximiza su potencial. No tiene que preocuparse por una tarea que no domina porque sabe que cuenta con el conocimiento y el apoyo de sus compañeros. Esto hace que se produzca un trabajo de mayor calidad.
Otras ventajas del trabajo en equipo que se pueden citar: se consigue una alta motivación entre los colaboradores, y se comparte la información y el conocimiento, lo que significa un mayor aprendizaje, tanto para los individuos como para el equipo. Cuando el equipo funciona bien, se realzan las fortalezas individuales compensando, al mismo tiempo, las posibles debilidades de cualquier otro miembro. Así, el resultado alcanzado por el equipo será superior al trabajo alcanzado individualmente.
El trabajo en equipo disminuye el estrés, porque tanto las tareas como las responsabilidades, se reparten entre todos. Se estimula la creatividad con la combinación de los esfuerzos de los individuos. Ese “brainstorming”, o lluvia de ideas, ayuda a generar nuevas soluciones para los problemas y para los procesos. La diversidad del equipo, y el tener distintos puntos de vista de los miembros, ayuda a crear soluciones más efectivas para los problemas.
Ahora bien, no creas que conseguir que la gente trabaje en equipo es una tarea fácil. No ocurre por arte de magia. Debes tomar en cuenta un sin número de factores que te facilitarán dicha tarea: debes tener una comunicación abierta, fluida y transparente con tus colaboradores. Ellos deben sentirse parte de la solución. Tómalos en cuenta a la hora de tomar decisiones. Deben tener un sentido de pertenencia. Tienen que tener objetivos comunes. Promueve la responsabilidad colectiva y celebra los logros de todo el equipo.
En resumen, son muchas las ventajas y los beneficios que genera el trabajo en equipo para las empresas. Al producirse un mejor desempeño por parte de los colaboradores, esto se traduce en mejores resultados para la empresa. O sea, en una mayor rentabilidad.
Asegúrate de incentivar siempre el trabajo en equipo por encima del individualismo, y notarás la gran diferencia. Es un ganar ganar para todos.
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