¿Mujer? ¡Luchemos!

¡Brindemos por las mujeres! Las de ayer y las de hoy, las del campo, la ciudad, la empresaria, la política, la educadora, la estudiante, la ama de casa, la microempresaria, la médico; las que salen a la calle a batallar por el sustento de sus familias; las que nunca han tenido la oportunidad de obtener un título académico y cada día se levantan a dar lo mejor de sí. 

Brindemos por todas, quienes paso a paso, dejándose sentir y luchando por sus derechos y su espacio, han ido ganando terreno. Porque es notoria la presencia femenina en posiciones de mayor liderazgo, más participativas y de toma de decisiones.

Brindemos porque donde la mujer está presente, su visión, pericia, entrega, capacidad, accionar y resultados son notorios, dejando con ello un legado de grandes contribuciones y huellas en el camino.

¿Nos falta? ¡Sí! Aún queda mucho camino por recorrer hasta que logremos cambiar los paradigmas y esa lucha constante por la vida misma, la equidad y el respeto.

¡Luchemos! porque haya menos feminicidios pasionales.

¡Luchemos! por erradicar la violencia de género y el machismo cultural que nos envuelve.

¡Luchemos! por disminuir drásticamente los abusos y embarazos en adolescentes.

¡Luchemos! para que vivir siendo mujer no se convierta en un mundo oscuro cargado de miedos y zozobras.  

¡Luchemos! por una completa igualdad de derechos de mujeres y hombres en todo el mundo.

¡Luchemos! sabiendo reconocer las diferencias naturales entre el hombre y la mujer, y con ello el complemento que debe existir entre ambos.

¡Luchemos! porque es vital educar desde el seno del hogar y la familia, inculcando a nuestros hijos e hijas los valores, la consideración, comunicación, tolerancia y el reconocimiento mutuo, los roles compartidos a lo interno de la casa, sin discriminación de ningún tipo.

¡Luchemos! por nuestra dignidad y respeto, desde el momento que nacemos.

¡Luchemos! por una sociedad equitativa.

¡Luchemos! para que llegue el día en que no tengamos que alzar nuestra voz reclamando con coraje nuestros derechos, y que nuestra participación en todos los ámbitos fluya acorde con los tiempos. 

Mujeres, sigamos en pie, firmes, con la intuición que nos caracteriza, con amor propio, valentía, determinación y propósito; conociendo los retos que tenemos, sabiendo que nuestra voz es firme y enérgica, que unidas y apoyándonos podemos alcanzar la transformación si empezamos por reconocer el valor y la fuerza individual que cada una tenemos, ese poder interno que nos impulsa a darlo todo hasta lograr lo que nos proponemos.

Mujer ¡El Poder está en ti!.