Cada inicio de año trae consigo la aspiración de atender de manera efectiva nuevos desafíos y de enfrentar aquellos problemas que históricamente acarreamos sin lograr resolver. Esto se pone de manifiesto desde las aspiraciones individuales como personas, hasta los grandes problemas que nos afectan de manera colectiva a nivel global. El cambio en el calendario nos lleva a reflexionar sobre cuáles son las oportunidades de mejora que se necesitan atender, esas que no podemos postergar más y, al mismo tiempo, el plan para contener las posibles implicaciones por no haber atendido las mismas.
Lo personal es un ejercicio individual, que ojalá que todo el que lee este artículo, pueda hacerlo de manera periódica sin la necesidad de esperar un nuevo año. Aprovecho el espacio para enfocarme en lo global, aquello que nos afecta como colectivo, a propósito de la publicación del Global Risks Report 2023.
Nueva vez, el Foro Económico Mundial reporta sobre las áreas que globalmente se encuentran en un punto de inflexión, las cuales podrían generarnos serios impactos a nivel social, medioambiental y económico.
El reporte destaca los cinco mayores problemas que pueden surgir en los próximos dos años: 1) la crisis por el costo de la vida, algo que tensiona a todos los países del mundo y, en especial, a aquellos que tienen un desarrollo humano y económico más bajo. 2) Los desastres naturales, eventos cada vez menos predecibles y de alto impacto. 3) La confrontación geoeconómica, ya que contrario a años atrás, la economía internacional ha dejado de ser un motor de prosperidad y estabilidad, convirtiéndose en detonantes de conflictos entre países. 4) Las fallas en el control del cambio climático a pesar de los muchos esfuerzos realizados desde diferentes ámbitos y, por último, 5) la falta de cohesión de la sociedad y la polarización social, ya que cada vez más vivimos en un mundo en donde la desigualdad, la pobreza y la vulnerabilidad se acrecientan.
Si ahondamos en el reporte, para los próximos 10 años, se espera que las principales crisis a enfrentar sean en torno a las fallas en la prevención del cambio climático, la falta de adaptación de los nuevos climas, los eventos de desastres naturales y climas extremos; el colapso de la biodiversidad y la consecuente pérdida de la biodiversidad, y la migración involuntaria a largo plazo. Todos temas se relacionan con la oportunidad de reforzar aún más en los aspectos de protección y cuidado del medioambiente; a los aspectos sociales en cuanto a generación de oportunidades; cierre de brecha y reforzamiento de la educación en jóvenes y mujeres, y los aspectos relacionados a la gobernanza y esa posibilidad de que los países logren una correcta interrelación entre el Estado, la sociedad civil y los sectores empresariales de industriales para así lograr un desarrollo económico, social e institucional estable.
Para atender estos retos, hay dos aspectos fundamentales que faciliten una atención rápida y efectiva a estas amenazas: que dicha atención sea sostenible en el tiempo y, por ende, que sea costo eficiente para los gobiernos, para el país y sus ciudadanos.
Hablo, en primer lugar, de la innovación digital como una fuente de toma de decisión rápida, de monitoreo y de eficiencia para atender mejor dichos desafíos y, en segundo lugar, de un nuevo modelo de negocio que ponga al frente a las comunidades y al cuidado y la protección del medio ambiente, de manera que, además de contar con las aprobaciones legales establecidas por las leyes, las empresas puedan contar con la licencia social que hará posible un nuevo modelo de negocio que garantice un crecimiento sostenible, transparente y responsable.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011