Natalia Khomyshyna, Consultora en marketing legal y comunicación politica: “Traemos a la República Dominicana y América Latina las mejores  prácticas de marketing legal y consultoría política”

La distancia entre nuestro país y Ucrania es de 9,277 kilómetros, pero eso no le importó a Natalia Khomyshyna cuando decidió radicarse en la Primada de América, hace más de 10 años. Hoy, esta Licenciada en Relaciones Internacionales, con Maestría en Ciencias Políticas, ofrece consultoría a firmas de América Latina y República Dominicana en planificación estratégica de firmas de abogados, desarrollo de negocios, marketing legal, comunicación de crisis y también en comunicación política para los candidatos y partidos.

La historia de Natalia Khomyshyna es increíble. Hoy, la mayoría de los dominicanos, lo poco y nada que conocemos de Ucrania, es la guerra en que se encuentra inmersa con Rusia en la actualidad, lamentablemente…

Sin embargo, esta profesional desde hace más de 10 años que reside en el país, y su experiencia es digna de contar.

Por ejemplo, cuando llegó al país, en el 2013, no tenía el nivel ideal del idioma español, “yo aprendí español por canciones de bachata (Risas)… Pensaba que sabía hablar bien, entendía todo, pero cuando entré a trabajar en la firma de abogados sentí un reto, pero todos me hablaban en español y yo agradezco mucho a la gente que me corregía cuando era necesario y me ayudaron mejorar mi nivel”.

Incluso, Khomyshyna comenta que su primer viaje al país fue por trabajo, “pero luego hice como cuatro viajes como turista, ¡y me encantó el país!”.

“Recuerdo que, en un viaje a Punta Cana, dije: ‘qué lindo país, que pena que yo no hablo español, porque me gustaría vivir aquí’.

Y eso me dio una lección, porque a veces uno mismo se cierra la puerta, porque en tres meses ya yo hablaba español… Porque tenía amigos dominicanos, con los cuales hablaba por redes sociales, y ellos no hablaban bien inglés, y les pedí un día que me hablaran en español, y luego yo lo traducía por Google Translate. Y con eso, y las canciones de bachata, ¡aprendí a hablar español!. Yo no creo que haya otro idioma que se pueda aprender tan rápido. El español es muy fácil aprenderlo para las personas de mi país y es importante que me gusta mucho”.

Para conocer más a fondo la historia de Natalia Khomyshyna y su nueva firma de consultoría, revista CONTACTO la entrevistó para su sección Business From Cappuccino, en el restaurante Il Cappuccino, donde nos contó todos los detalles de su emprendimiento.

Marketing legal y comunicación de crisis

Natalia, ¿en qué momento te surgió la idea de crear tu propia empresa?

“Yo creo que pensaba esto desde hace más de 10 años. En una ocasión, hablé con una compañera y le dije ‘si antes de los 40 años no creo mi empresa, eso será como un epic fail para mí, será como un fracaso grande’.

“Siempre entendía que tenía que ser mi propia jefa y yo tengo mi visión. Trabajando para una compañía hay límites, y yo siempre quería hacer cosas diferentes.También, quería desarrollar esa parte de comunicación política, y estando en una empresa, no puedes ser consultora en otra área”.

Entendí, en algún momento, que la marca personal vale mucho, no solo para los abogados o políticos, sino también para mí. La experiencia que yo tengo es lo que estoy ofreciendo, porque cada cliente quiere que trabaje personalmente ciertos temas con ellos. Yo no hago un trabajo de rutina de mercadeo, yo hago auditoría, consultoría estratégica de mercado, asesoramiento conectado con temas de negocios, y es un trabajo que yo no puedo delegar a nadie, por eso es importante que ofrezca un servicio personalizado.

Claro que tengo un equipo que trabaja conmigo, estoy aliada con una de los mejores profesionales de Europa en negocio legal, también trabajo con diseñadores, web programadores, especialistas de tecnología y consultores políticos destacados. Así puedo ofrecer una asesoría integral cual va más allá de área de mercadeo y comunicaciones. En mi práctica profesional he encontrado a muchos profesionales de varios países y ahora puedo trabajar con los mejores, no importa en que país residen. Me gusta traer mejores prácticas para el mercado latinoamericano, que sea, por ejemplo, consultoría estratégica de negocio legal o temas de tecnología y ciberseguridad para firmas de abogados. Lo último me parece mucho más desarrollado en Ucrania, y es honor para mí ofrecer los especialistas de mi país en esta parte del mundo. Con mucho gusto hago estas conexiones”.

¿Con firmas de qué países de la región trabajas actualmente, y en qué áreas? 

“He trabajado con países de Centroamérica, tengo clientes de Polonia, Ucrania. Gracias a Dios que todos aprendimos a trabajar de forma remota”.

Tienes amplia experiencia en Comunicación de Crisis. ¿Cuéntanos sobre esto, qué haces específicamente? 

“En Ucrania, trabajé con clientes que tenían casos mediáticos en litigio y les ofrecimos esa parte de comunicación, y junto con abogados, yo estaba estudiando estrategia de cómo mejorar la reputación y mitigar todos los riesgos para los clientes. 

Entiendo que cada firma debe tener un plan de manejo de crisis. El mejor manejo de crisis es prevenirla. Hay muchos abogados que tienen visiones políticas, o que manejan algunos casos con gobierno, pero mañana cambia el gobierno y entran en un fuego político”.

¿Qué servicios ofreces en comunicación política? 

“No solo servicios personalizados para algún candidato, puede ser cualquier persona que quiere ser político. Corrección de imagen, creación de campaña, organización del trabajo, branding de campaña.

Puedo entrar en cualquier etapa de la campaña, como consultora puedo supervisar los procesos de cómo está funcionando la campaña, y también como consultora personal del candidato. Sobre todo, cuando vienen consultores de otros países y se necesita una visión más local, que ellos no pueden trabajar. Vemos toda la corrección de imagen, vestimenta, hasta tengo aliados que pueden analizar su perfil psicológico para determinar cómo esta persona puede ser más fuerte.

Te voy a poner un ejemplo con un abogado, que hay abogados que venden y hay otros que son buenos administrando la firma o hay abogados que hacen bien el trabajo legal, pero no saben vender. Igual con políticos, que tienen perfiles muy diferentes. Hay que ver la personalidad de las personas para no ponerles algo que no les va a funcionar.

Algo que me enseñaron cuando estudié política, es que uno no debe estar involucrado mucho emocionalmente en el proyecto.

De alguna manera, uno debe ser un poco apolítico, alguien me va a juzgar por decir eso, porque cuando tú estás dentro del sistema, tú no ves todo. Pero cuando lo ves desde arriba, desde afuera, puedes ver muchas más cosas y entender lo que está pasando. Tener esa visión crítica”. 

20 años de experiencia

Natalia, cuentas con casi 20 años de experiencia en marketing y relaciones públicas en diferentes industrias, incluyendo 15 años en el sector legal. ¿Cuéntanos cómo comenzó todo en Ucrania? 

“Yo trabajo desde los 19 años, todavía estaba estudiando y, por coincidencia de la vida, conseguí un trabajo en el área que yo estaba estudiando, que eran relaciones públicas.

Comencé a trabajar en agencias de publicidad, agencias de relaciones públicas, y en el año 2008, entré a una firma de abogados, en Ucrania, donde me estaba desempeñando como directora de Mercadeo y Comunicaciones, y así sigo en ese sector legal”. 

¿Te gustaba el área legal?

“Cuando yo entré a la firma de abogados, recuerdo que no había enviado mi currículo, la envié a una agencia de reclutamiento, y cuando me llamaron, lo primero que pensé fue: ¿‘será muy aburrido’?, pero realmente, no me aburrí, y 15 años después, puedo decir que es lo más difícil que he hecho en mi carrera, porque el sector legal es muy particular, y no es suficiente saber sobre herramientas de mercadeo… Hay que tener dos cosas más que son más importantes saber: para convertirse en especialista de alto nivel en el mercado legal, hay que tener conocimientos muy profundos de este negocio y su gestión, cuales usualmente aprendes con años de experiencia y en un ambiente retador.  Y la otra parte, es que hay que tener carácter. Es muy difícil el sector. A veces toca trabajar con diferentes perfiles de abogados. Saber negociar, saber defender su punto de vista, a veces ser más socio que algunos socios, pensar como un socio rainmaker, ser atrevido y muy resistente a estrés. ”. 

Eres Licenciada en Relaciones Internacionales (comunicación y propaganda), y tienes maestría en Ciencias Políticas. ¿Por qué te decidiste estudiar estas materias? 

“Yo siempre pensaba que la comunicación política es el nivel más alto de ser experto en comunicación. Si el sector legal es difícil, el político es mucho más difícil, mucho más retador.

Yo creo que si quieres trabajar en ese sector, debes tener ciertos conocimientos y también resistencia personal, saber trabajar bajo presión, reaccionar rápido. Siempre me gustaron los retos”. 

También, has dirigido departamentos de mercadeo y desarrollo de negocios, en firmas de abogados líderes de Ucrania y República Dominicana. ¿Cuéntanos sobre estas experiencias?

“En total, son 15 años. Cinco años en una firma ucraniana, que era una firma bastante grande.

Cuando llegué a República Dominicana, trabajé siete años en una de las principales firmas del país, y dos años y medio en otra de las top 5 del país. Son todas firmas diferentes y, al mismo tiempo, parecidas, porque es el mismo tipo de negocio.

Ahora, como consultora, trabajo con varias firmas y son súper diferentes todas. Cada firma es única. Ahora, mi trabajo es mucho más interesante, porque puedo ayudar a más firmas y retar ese mercado, enseñarles mejores prácticas”.

¿Cómo podrías definir estos 10 años en República Dominicana?

“El país ha cambiado mucho y avanzado mucho. Yo puedo recordar, como una persona que ingresó al país y tenía que hacer el proceso migratorio… la primera vez que entré a la oficina de Migración en el 2013, salí llorando porque ‘era un caos’, no había ni sillas, pero ahora es mucho mejor. Ya no tengo que ir, porque ya soy ciudadana dominicana.

También es increíble cómo se desarrolló el turismo. Al día de hoy, no creo que hayan personas en Europa que no sepan dónde está República Dominicana. Cómo se recuperó el turismo en el país tan rápido después de la pandemia, es increíble.

Yo creo que el país ha avanzado muchísimo y eso me alegra”. 

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