Las empresas solo pueden sobrevivir en el largo plazo si resultan económicamente viables, medioambientalmente sostenibles y socialmente responsables
El concepto de la triple cuenta de resultados, o dicho de otra forma, la creación de valor económico, social y ambiental, es un concepto que tiene más de veinte años y fue desarrollado por John Elkington en su trabajo Cannibals with Forks (1997).
Indica que las empresas solo pueden sobrevivir en el largo plazo si resultan económicamente viables, medioambientalmente sostenibles y socialmente responsables.
No hay que subestimar el importante papel que tienen las empresas como motores de cambio y progreso, contribuyendo a la reducción de la pobreza cuando aumentan su productividad, al mismo tiempo que generan oportunidades de empleo, además de producir bienes y servicios esenciales para las personas. Pero la responsabilidad de la empresa va más allá.
Bajo este esquema, ser sostenible es lograr ese fino equilibrio entre los ejes económico, social y medioambiental en el largo plazo, pero de una forma integral, ética y responsable. Ese es el verdadero reto.
Hoy día las empresas se enfrentan a regulaciones y exigencias ambientales, legales y laborales más estrictas; a una mayor fiscalización de la sociedad civil; a mercados establecidos y potenciales cada vez más demandantes y a clientes más exigentes. Por eso es necesario replantear un nuevo modelo de negocio empresarial, donde los beneficios sociales y medioambientales formen parte del éxito corporativo y le otorguen la legitimidad social y ética que le asegure a la empresa su estabilidad a largo plazo. Visualizar los nuevos retos y desafíos del panorama económico y comercial cambiante, y transformarlos en oportunidades que puedan ser integradas a la estrategia de la empresa para su ejecución y materialización, es el factor determinante para llevar a cabo un triple resultado exitoso.
Eje económico: resulta más que evidente que una empresa debe ser rentable y generar utilidades para sus accionistas. Sin ganancia no hay empresa.
Eje social: podemos hacer un breve enfoque en tres grupos principales (existen otros no menos importantes):
Empleados: la empresa debe actuar como un buen empleador, con un adecuado clima laboral. Esto contribuye a aumentar los niveles de satisfacción, pertenencia, compromiso y lealtad, a una mayor productividad, menor rotación y retención de talentos.
Proveedores: la empresa debe velar por el fortalecimiento de la cadena de valor en lo económico, social y ambiental.
Comunidad: la empresa debe generar buenas relaciones, que permitan mejorar el entorno común e incremente la influencia de la empresa en la comunidad, reforzando así su licencia social.
Eje ambiental: la empresa debe ser responsable de gestionar y mitigar los impactos ambientales asociados a su operación y ser un agente de cambio. Iniciativas como reciclaje, ecoeficiencia, uso de energías renovables, productos y servicios ecoamigables; reducción de la huella de agua o huella de carbono, siempre son temas bien vistos por los mercados y la sociedad en general, siendo además un valor agregado y una ventaja competitiva para la empresa que las adopta.
Aunado a la importancia de lograr el equilibrio entre esos tres ejes: económico, ambiental y social, el tema de la transparencia juega un papel protagónico, ya que logra generar y mantener la confianza necesaria, incorporando mejoras relacionadas con el buen gobierno corporativo y las buenas prácticas de gestión.
La transparencia es un tema que interesa a todos los grupos de interés. Permite a las empresas estar mejor preparadas para atender las actuales demandas de información de la sociedad, basadas en unos mayores niveles de exigencia e informar sobre lo material de su actividad empresarial.
De esta forma, las políticas y programas desarrollados para hacer frente a los retos y oportunidades de la empresa pueden dar respuesta a las opiniones y preocupaciones de los grupos de interés, creando una alianza que facilita el cumplimiento de objetivos comunes, los cuales se reflejan en la triple cuenta de resultados.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011