Paloma de la Cruz “Enseña a Soñar” a los emprendedores

A sus 27 años ya conoce 54 países. Esta aventurera inició su travesía en un avión a los 17 años, edad a la que creó su primer blog como una forma de mantener a sus padres “informados” de su día a día, blog que luego se convirtió en una forma de ella mostrar los países que conocía a través de los ojos de una dominicana, y claro, llegó un momento en que necesitaba ganar dinero, y ahí fue cuando hizo la transición a la moda. Hoy, Paloma de la Cruz se ha convertido en una verdadera influencer y en fuente de inspiración para muchos jóvenes que quieren ser como ella.

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April 16, 2019

Para Paloma de la Cruz emprender un nuevo viaje es una forma de buscar respuesta a interrogantes en su vida, pero también es una forma de aprender, de venir con ideas nuevas y cargada de energía para continuar. Siguiendo su pasión por la moda creó Vintage Clothes by Paloma de la Cruz, talleres como “Enseñar a Soñar” y “Mapa de Sueños”, y este año se certifica como coach. El propósito de esta joven es ayudar a otros a encontrar su camino en el mundo del emprendimiento.

Paloma asegura que “no tiene una gaveta llena de inyecciones de felicidad”, pero está dispuesta a que a través de sus talleres, “otros jóvenes puedan reencontrarse con su talento” y sepan cómo sacarle provecho.

Entrevistada por revista CONTACTO en su oficina personal, Paloma de la Cruz nos mostró su espacio cargado de sueños.

¿Cómo surge la idea de crear un blog a los 17 años?

“No me surge la idea, fue una manera de escapar de la constante llamada de mis padres. A los 17 años, cuando termino el colegio, no estoy segura de qué estudiar y ese es el momento donde conozco a AFS, una institución que propicia los intercambios culturales, y digo: ‘yo lo que quiero es irme a vivir fuera un año’, tener un año sabático, donde yo me conozca, donde yo conozca el mundo… regresé refrescada y, sobre todo, llegué con la idea más clara de saber qué estudiar… pero mis padres, que siempre han apoyado mis ideas, necesitaban tener control de mi y ahí es donde comienza de nuevo la rutina, a llamarme: ‘¿qué tu haces?, ¿es verdad que estás en Oslo?… que me llegó una notificación de la tarjeta’. Y yo les dije: ‘voy a empezar un blog para escribir ahí todo, ahí ustedes me podrán leer y así todos seremos felices’. Ese primer blog fue a los 17 años, y para que no me juzguen con el nombre, se llama yovivolavidaasí.blog.com, y ahí es donde comienzo a escribir mis días. Luego, ese blog pasa a ser moda cuando regreso de Bélgica e inicio con Vintage Clothes by Paloma de la Cruz. Yo necesitaba explicarle a la gente qué era Vintage; qué era comprar ropa usada; qué era lo que yo intentaba rescatar; cuál era el potencial de esas piezas; cuál era la historia detrás de esas piezas, y tenía que hacerlo escribiendo y ese blog, que inició siendo de viajes, pasó a ser un blog de modas”. 

¿En cuántos países estuviste durante ese año? 

“Yo recuerdo que fui la estudiante de AFS que más viajó en ese año, pero no te sé decir cuántos países… bueno, al sol de hoy, ya conozco toda Europa y esa travesía comenzó a los 17 años… y continuó recientemente. Cada vez que tengo oportunidad conozco nuevos lugares, pero ese año te pudiera decir que unos siete países”. 

A los 17 años, aún eras menor de edad, dependías de tus padres económicamente, ¿No te dió miedo en algún momento?

“Eso lo pienso ahora y me sorprendo, porque pienso que los miedos los vamos adquiriendo con los años. A los 17 años uno no tiene miedo, tu sientes que te puedes ‘comer el mundo’. De hecho, a mi me pareció contradictorio que a los 24 años me pusiera tantas trabas para irme a hacer una maestría… y a los 17 nada. Y más cuando en esos años no iba a significar nada, cuando no tenía confianza de lo que era ganar dinero, no sabía lo que era Europa, donde iba a un país donde ni siquiera se hablaba mi idioma… a los 17 años fue pura aventura, sin ningún tipo de miedo”. 

¿Qué estudiaste?

“Mercadeo. Cuando regreso de AFS, me inscribo en la universidad y me convierto en líder del mañana, becada. Estudio Mercadeo y dos años después de terminar la carrera hago mi maestría, que fue un MBA en Emprendimiento”. 

¿Cómo fue el cambio de un blog de viajes a terminar en uno de moda?

“El dinero que se suponía que iba a ser para mis estudios universitarios fue el que utilicé en la AFS. Al regresar, con una mano adelante y otra atrás, como buen dominicano, necesitaba cubrir mis gastos universitarios y la verdad que la universidad que yo quería no iba a poder ser costeada por mis padres y ahí es donde inicio el proyecto buscando qué es lo que normalmente la gente ve en mi, y la gente lo que siempre veía era: ‘qué chula tu ropa, dónde tu compras esa ropa, y ese estilo tan chulo, qué es eso vintage’, y ese estilo yo lo conocí en Bélgica. Y cuando regreso aquí, comienzo a rescatar piezas con pura creatividad para hacer dinero. Entro al mundo del emprendimiento y ahí es donde me convierto en líder del mañana y puedo pagar mis estudios con mi part time de trabajo y, al mismo tiempo, me convierto en emprendedora”.  

¿Has pensado en algún momento en estudiar diseño de modas?

“La verdad es que no. Me gusta más el proceso mercadológico y de negocios, aunque la moda siempre fue parte de mi. He diseñado los vestidos de todos los 15 años. Ahora estoy muy envuelta en los vestidos de boda. Cuando tengo algo especial me adentro en el mundo del diseño, pero no me lo imagino como modus vivendi, es algo que disfruto para mi”. 

¿Cómo consigues la ropa que modificas? 

“Las piezas vintage es algo que viene estacionariamente ahora. Yo apoyo Vintage Clothes con proyectos puntuales que lanzo. La última vez fue el año pasado con unas Fanny Pack, que son unas cangureras que creé. Ahora mismo, mi enfoque de venta de ropa es ropa nueva, que es Revival, el nuevo proyecto con que inicié en diciembre del año pasado”. 

 

Paloma, la viajera  

Tu saliste en un ranking hace un año como una de las influencers con más engagement de viaje. ¿Qué te pareció ver esa información?

“Eso me sorprendió mucho, ser la número uno. Realmente, me sorprendió porque siempre he entendido que me perciben como moda, pero ese fue el año que me fui a Europa, que estuve documentando mis días y, realmente, mi contenido era sobre viajes, que es completamente entendible. Para mi, los viajes son mi manera de refrescarme, de reinventarme, volver con pilas nuevas y, sobre todo, con ideas de cómo el mundo puede ser visto por los ojos de una dominicana, entendiendo lo que nos hace falta, lo que quisiéramos tener y, sobre todo, lo más importante: valorar lo que tenemos”. 

¿Cuántos países conoces actualmente?

“La última vez que me puse a contar, llevo 54 países. De hecho, en mi mapa de sueños, están los países que quiero visitar. A propósito, hace unos días compré el ticket aéreo para ir próximamente a la India”. 

¿Cuál es tu presupuesto para tus viajes, por ejemplo a India?

“Yo pienso que trabajo para viajar. Te voy a ser sincera, la pregunta del éxito ¿Qué quieres alcanzar? ¿Qué te quieres comprar? Para mi, está 100 % aterrizada a vivir y para mi vivir es eso: poder conocer, disfrutar y adentrarme a culturas es lo que a mi me llena y cada vez que tengo suficiente dinero, en eso es que se va. Claro, tengo planes a futuro. Me encanta capacitarme. Muchos de mis viajes son a capacitaciones, como en marzo, cuando me fui a ver a Robin Sharma, en Phoenix, Arizona, que fue un viaje de capacitación pero, al mismo tiempo, de recreación porque me permitió conocer un lugar que no conozco. Yo intento mantener un balance entre esas cosas. Soy malísima para el tema de los presupuestos. Te puedo decir que este viaje a la India lo estoy haciendo con un grupo de personas que sí tienen esa experiencia y el presupuesto es de 2,000 euros, porque no es un país caro, es un país rico en experiencias”.

 

Enseñar a soñar

Para muchas personas su sueño es viajar como tú lo haces. Hoy, impartes talleres denominados Enseñar a Soñar. ¿En qué consisten esos talleres?

“Enseñar a Soñar es el resultado de una de mis metas en 2017, cuando precisamente me voy a hacer mi maestría a Madrid con la idea de regresar con un modelo de negocios, porque ya me había cansado de hacer lo mismo. Yo soy muy de emociones, de lo que siento con las cosas, y sentía que lo que estaba haciendo no me estaba llenando y me fui a buscar esa respuesta. Cuando me toca hacer esa introspección de ver qué es lo que el mundo está necesitando de mi, hago un proceso de preguntar, de identificar: ‘¿Qué te hace feliz Paloma?; ¿Qué tu le aportas al mundo?’, y haciendo esto, descubro que hay un proceso que todo ser humano debe hacer para conectar con su propósito de vida. La gente, constantemente, me preguntaba: ‘¿Cómo lo lograste?, ¿Cómo alcanzaste tus sueños?, ¿Cómo vives viajando?’, y todo esto conectado crea un programa que es Enseñar a Soñar. Ya nosotros sobrepasamos el número 200 de participantes y es la experiencia más gratificante, porque es donde yo realmente he conectado con mi propósito y con lo que me hace feliz, que es ser colaboradora de los sueños de más personas, de ser esa voz de aliento y de contagiar felicidad y que todo lo que tu quieres lo puedes lograr si te enfocas en eso”. 

¿De qué manera descubriste cuál era la forma en que ibas a llegar a las personas?

“Yo creo que las oportunidades te encuentran trabajando y toda mi vida ha tenido cierto orden…Empecé con mi blog de viajes para que mis padres estuvieran en paz y tranquilos, ese blog de viajes pasó a ser un blog de modas, porque necesitaba que mi proyecto vendiera ropa. Luego, el documentar ese blog de modas hizo que una marca más importante creciera, que era Paloma de la Cruz, dejando atrás Vintage Clothes. Hoy, Paloma de la Cruz, como marca, documenta sus días, documenta sus éxitos, documenta lo que va viviendo y, de repente, se convierte en influencer. Es como el día a día de ir construyendo una mejor versión y sobre todo mejorando, porque cuando tu estás haciendo algo tu vas encontrando nuevas oportunidades de ir mejorándolo, y de ir haciéndolo crecer, y eso es lo que ha ido pasando durante estos nueve años en el mundo del emprendimiento, llegando finalmente a darme un expertice que quiero compartir con el mundo, porque mi ilusión es que la gente conecte con eso que los hace felices y lo puedan monetizar. Es un cliché y es algo que escuchamos todo el tiempo, pero cuando tu haces lo que te gusta no sientes que es trabajo. Como humana, a veces me canso, pero la gasolina que mueve ahora mismo mi corazón son esos mensajes de gente que están necesitando…la gente está muy habida de un mensaje; la gente está muy habida de conectar con otras cosas que no son necesariamente la percepción que vemos en las redes sociales”. 

¿Qué se llevan las personas que asisten al taller Enseñar a Soñar?

“En Enseñar a Soñar escuchan la historia que no todo el mundo conoce de Paloma de la Cruz, de cómo empezó todo esto, de los altibajos y con lo que realmente conectamos con los seres humanos, que son los momentos feos, porque ahí es que recordamos y decimos ‘yo también estuve ahí’. 

Enseñar a Soñar es contar mi historia, pero con enseñanzas de cómo tu puedes sacarle provecho a lo que sea que te esté pasando. Todo depende de la actitud que pongas frente a eso y luego venimos a la parte didáctica, donde un programa te va haciendo preguntas, donde desafío tras desafío ayuda a construir tu marca personal. 

La idea de todo esto es que tu descubras para qué eres bueno, le saques provecho y en coherencia construyas una marca personal, que no importa cual sea el modelo de negocios que quieras implementar, pero que esté amarrado con tu esencia”. 

Hablas de emprender, pero la gente tiene mucho miedo a emprender.

“De hecho, no estoy de acuerdo con que todo el mundo debe emprender, hay personas que necesitan la seguridad de un 9:00am a 5:00pm, y existe el intra emprendimiento que es encontrar una pasión dentro de tu trabajo y entender que un hobby también te puede ayudar y luego, paso a paso, tal vez tu puedes independizarte y decir: ‘Esto me está dando más resultado’, pero el dejarlo todo por nada tampoco es el concepto que lo que quiero que la gente haga, porque de algo hay que comer y tenemos que ser coherentes con lo que hacemos, porque la abundancia y el mismo deseo de superarnos, viene de cuando estamos estables. Cuando perdemos esa estabilidad no tenemos deseos de nada y más fácil nos aturdimos”. 

¿Cómo surgió el Mapa de Sueños?

“Mi vida se ha basado muy en conectar con mi corazón y vivir por pasión. Con Mapa de Sueños yo buscaba cosas que quería alcanzar cada año. Yo hago esto en enero de cada año y me he dado cuenta que siempre alcanzo todo lo que quiero. Me siento orgullosa del esfuerzo que pongo en las cosas, no porque lo pongo en un mapa y porque me siento a verlo, sino porque el verlo ahí me hace sentir que tengo una responsabilidad conmigo de alcanzarlo. Mira, ahí está Puerto Rico, que yo estuve ahí hace dos semanas, y ese Mapa de Sueños va trabajando como tu no te imaginas… ya compré mi ticket a la India; la tienda estoy trabajando en la página online; ese ticket (refiriéndose a Phoenix, Arizona) ya está comprado; Tony Robbins está ahí porque también quiero alcanzarlo, y paz, que es algo que yo quiero este año”. 

¿Por qué paz?

“Porque el año pasado viví muchos momentos difíciles y entendí que lo único que me podía mantener enfocada, productiva y tranquila era la paz. Me descuidé mucho entendiendo de que iba a encontrar eso en otras personas, de que no necesitaba a otras personas, cuando realmente todo lo que necesitas está dentro de ti y en los momentos difíciles te tienes a ti y lo que haz construido dentro…Estoy trabajando online en mis proyectos. Mapa de Sueños está completamente grabado online. Empecé con el yoga, porque no puedo hacer ejercicio por un accidente que tuve, por lo que estoy construyendo esa paz por medio del yoga. Y todo está conectado. Mira como el yoga surge en la India, cómo la paz surge con el Yoga”.  

¿Por qué crees que te sigue tanta gente en las redes sociales?

“Yo pienso que por lo mismo que dije en la última edición de Enseñar a Soñar. ‘¿Ustedes piensan que yo tengo una gaveta de inyecciones de felicidad?’. Creo que la gente me sigue para contagiarse de eso. La vida está llena de noticias feas y todos llevamos nuestras propias batallas y entender que mis batallas son un poco públicas me hace ver real… Yo documento mucho lo que vivo y trato de sacarle un aprendizaje a todo y de ahí surge la carta de los martes. Yo digo ‘I live, I learn’, yo vivo y aprendo, todos los días tenemos algo que aprender”. 

¿Cómo lidias con la gente que critica todo en las redes sociales?

 

“Me ha pasado y esa fue una de las cartas de los martes, porque el estar tan expuesta tu te vuelves vulnerable y es una decisión que cada quien decide tomar… al final de cuentas, no somos ninguna monedita de oro para caerle bien a todo el mundo y lo único que tenemos que hacer es lo que entendemos que está bien. Yo siempre respondo con amor”.  

 

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