Adriana Boscarolo: Empoderando a las mujeres a través de la vestimenta

Adriana Boscarolo es una periodista venezolana que lleva seis años residiendo en República Dominicana. Al llegar aquí, vio la oportunidad de “aterrizar” su proyecto que ya lo tenía conceptualizado a una especie de blog magazine, pero que necesitaba ajustar algunos puntos.  

“Inicialmente, AB Style fue un blog y después que llego (a República Dominicana) me doy cuenta que tenía absolutamente todo, más que dispuesto, para poder desarrollarlo en el nicho del mercado dominicano”, explica Boscarolo, entrevistada por revista CONTACTO en su oficina. 

Adriana tiene dos pasiones: la comunicación y la imagen. AB Style unió estas pasiones y así comenzó a través de ellas a ayudar a “resolver un problema”.  

“Siempre estuve muy consciente del poder de la expresión a través de la imagen, de ese mensaje que damos intrínsecamente, sin siquiera decir una palabra, y sabía que si unía esas dos herramientas iba a dar una excelente sinergia para poder brindar a las personas cómo pueden potenciar su imagen y cómo pueden utilizarla en lo profesional y en lo personal”. 

Adriana se enfocó más en enseñar sus metodologías en base al doing yourself, en donde les demuestra a las mujeres que todas pueden convertirse en su propia estilista y que pueden hacerlo por sí mismas.  

“Mi mensaje está diseñado para una mujer universal, hablamos para República Dominicana, pero también le hablo al público colombiano, le hablo al público latino, porque todas, sin importar donde vivamos, tenemos exactamente los mismos problemas con nuestro closet”. 

¿Cómo nació AB Style?

“Yo sabía que la imagen era dirigida hacia la concepción de figuras públicas, personas que se dedican al espectáculo y yo fui una que quiso desmontar un poco esa idea mal conceptuada, que una persona que necesita una asesoría es porque tiene un evento, es una figura pública o es especial. Todos nos vestimos a diario y tenemos problemas en todo lo que conlleva el ciclo de la compra, el uso y la combinación. Entonces, poderle brindar a las mujeres la posibilidad de que puedan mejorar todo ese ciclo sentía que en este caso la plataforma era el eslabón perfecto para convertir a AB Style en el aliado del clóset de una mujer. Ahí nace la plataforma. AB Style está diseñada en base a mis metodologías que he diseñado, un dress system, donde una persona con mucha ropa, con poca ropa, con conocimiento de moda, puede a través de estas metodologías poder desenvolverse de una manera exitosa con su imagen, con su ropa y con su clóset”.  

Tú ayudas a las mujeres a empoderarse a través de la vestimenta. ¿Cuál es la parte más difícil de ese trabajo?

“A veces tener que lidiar con el factor emocional de la imagen. La imagen a veces se desvirtúa y se considera algo bastante superficial, hasta a veces irrelevante. Y, básicamente, todos estamos no solamente actuando sino asumiendo de los demás todo de acuerdo a lo que vemos. Entonces, asumimos una primera impresión, actuamos en base a esa primera impresión y todo está involucrado en la parte emocional. ¿Qué pasa con lo emocional? Que tienes que ser bastante delicada y sumamente responsable para entender hasta dónde las herramientas pueden hacer o brindar un resultado. De lo contrario, creo, y estoy segura, que una persona que llega a ti con una necesidad, esa necesidad tiene que ser cubierta desde las metodologías. De ahí en adelante, siempre hago la recomendación de que puedan buscar otro tipo de agentes para conseguir el objetivo en su totalidad”. 

En una ocasión dijiste que “muchas mujeres visten a los complejos, no a los cuerpos”. ¿Qué tan común es tener que lidiar con los complejos?

“Muy común. Una de mis frases claves que digo siempre antes de que una persona haga una sesión de asesoría junto a mí, es que ‘en la sesión no están invitados los complejos’, porque empezamos a vestirlos, les dedicamos tanto tiempo que desvirtuamos lo que realmente nos gusta de nosotros. Entonces, no los vestimos, no los conocemos, no sabemos cómo repetir nuestras fórmulas de éxito, porque nuestro cerebro, sin querer, es demasiado vulnerable hacia el auto sabotaje de nuestra imagen, porque son temas de percepción: qué veo yo acerca de mí. Esa percepción de mí la visto, la modulo, la converso, la manejo de una forma involuntaria. Por eso es que yo digo que la imagen, a pesar de que la muestro en un área de una forma demasiado divertida y dinámica, tiene un fundamento demasiado emocional”. 

¿Cómo ayudas a las mujeres a tener un smart closet?

“El clóset es la columna vertebral de todas nuestras combinaciones. Un clóset que no está construido de una manera correcta es un clóset que va a tener déficit, tanto en la compra, en la combinación, como en el estilo personal. Cuando una mujer tiene un clóset inteligente tiene el privilegio de poder sacarle el mejor provecho a cada prenda y esto nos permite también activar el botón de la creatividad para poder hacer de que nuestra ropa luzca diferente. Si fuese nada más un tema de cantidad, entonces todo el mundo se vería bien. Es más un tema de cómo tú identificas las prendas correctas para que estas puedan servirte para diferentes ocasiones, para diferentes intensiones y que puedas jugar con tu estilo personal. No podemos ser psicorrígidos en la manera en que nos vestimos, sino identificar todas aquellas características que dicen algo de nosotros y utilizarla de una manera intencional”. 

¿Por qué es tan importante la organización del clóset?

“Porque somos muy visuales, lo que no vemos no lo utilizamos. La mayoría de los clóset tienen tres problemas esenciales, que son: optimizar el espacio, que es un tema visual o funcional, ya que hay clósets que se ven increíbles pero son cero funcionales. Es decir, para sacar una camisa tienes que voltear todo el clóset. Hay clósets que, por el contrario, son muy funcionales, pero no son nada estéticos. Eso no nos motiva a tener una buena relación con el clóset, disfrutarlo, utilizar variedad. Entonces, si esos tres puntos, tanto lo estético, funcional y el hecho de optimizar el espacio están cumplidos, eso se ve reflejado en la manera de cómo me combino y me visto. La organización es una pieza clave”. 

Tú eres una mujer muy arriesgada con el uso de colores. ¿Cómo haces para que tus clientes le pierdan el miedo a usar colores en su vestimenta?

“El principal problema de las mujeres es la monotonía al vestir, nos sentimos demasiado cómodas con los neutrales y eso afecta demasiado nuestro sentido creativo. De modo con el cual, el Ebook del color te ayuda a poder tener una relación real con los colores y es que por encima de cualquier codificación de colores, la mayoría de las mujeres sale sin tener un conocimiento de cómo esa falda roja que tiene en el clóset puede mezclarla con esos zapatos que son fucsia… No hay una relación con el color por el temor a equivocarnos, por eso nos vamos por el camino fácil. El Ebook del color tiene diferentes niveles donde tú puedes, poco a poco, ir evolucionando tu relación con el color”.  

¿Qué color no debe faltar en el clóset de una mujer? 

“Rojo, porque es un color primario y es el color más amistoso para relacionarse con el resto de los estampados y con el resto de los colores. Funciona excelente como el primer color introductorio en un clóset”. 

¿Qué pieza no debe faltar en el clóset de una mujer?

“Una camisa blanca de vestir. Es la prenda más rica en un guardarropa y una camisa blanca de vestir no es cualquier elemento, es un elemento en donde puedes hacer la magia de los cinco usos: una camisa blanca que te represente en la mañana, en la tarde, en la noche, para ir a trabajar, para salir con tus amigas, en el fin de semana; que puedas representarte con una prenda de diferentes maneras, es cuando no solo tienes a una prenda inteligente, sino a un most have que no puede faltar”.

ADRIANA, LA INFLUENCER

¿Qué han significado las redes sociales para tu negocio?

“Yo nunca me he considerado una influencer por una razón en especial, que una de las cosas por las que las personas me recuerdan, que para mí ahí es donde está la influencia de todos, no es por lo que tú entiendes o te denominas, es por lo que los demás te recuerdan. Yo no puedo ir ni a un solo lugar porque la gente me está conversando de cómo está vestida, de una anécdota de su ropa y ahí entiendo es donde está la verdadera huella. De mi lado como figura, como imagen principal de lo que es la empresa y la plataforma AB Style, pero entiendo que eso es lo que  estoy dejando en esa huella de cada mujer. Yo disfruto demasiado el hecho de comunicar y siento que lo que sucede en mi espacio es divertido y diferente”.  

¿Cuáles aplicaciones usas para trabajar tus redes sociales?

“Yo trabajo en dos esenciales, porque la plataforma está destinada a ideas de inspiraciones de looks que funcionan lo más similar a un App y son a través de Picsart, esto es como el Photoshop de la computadora llevada al celular. También está la aplicación Preview, donde hago toda la maqueta y el esquema, porque mi cuenta es 100 % visual y para nosotros trabajar la planificación de todo ese contenido, que se ve hermosísimo, pero lleva muchísimo trabajo”.  

¿Qué te gusta y qué no te gusta de las redes sociales?

“Me gusta la capacidad que tienen de conectarnos, sin importar lo geográfico. No tiene barreras. Lo que no me gusta es la irresponsabilidad en términos de opinar. Hay muchas personas que emiten comentarios y juicios negativos, llevando un mensaje incorrecto”.