Uno de las primeras cosas que debemos hacer es confirmar si el distribuidor o concesionario permite realizar pruebas de manejo o “Test Drive”
El sueño casi todos nosotros es poder adquirir un vehículo nuevo, deshacernos de ese auto viejo y gastado que teníamos para convertirnos en los primeros en tener el privilegio de manejar ese anhelado vehículo que siempre hemos deseado y que nos cautiva cada vez que lo vemos transitar flamantemente en las calles. Sin embargo, ya que hemos trabajado tan duro para realizar esta inversión, es recomendable hagamos algunas investigaciones y evaluaciones previo a materializar la transacción, lo cual nos permitirá hacer la elección correcta y garantizar que ese gran sueño no se convierta en un dolor de cabeza con el paso de los años.
Uno de las primeras cosas que debemos hacer es confirmar si el distribuidor o concesionario permite realizar pruebas de manejo o “Test Drive”, esto ya que probablemente ese vehículo que nos encanta como luce no necesariamente nos cautive al conducirlo, de repente lo sentimos muy lento, pesado, grande o incómodo y de no haberlo conducido antes probablemente no podamos satisfacer nuestras expectativas de comodidad y confort. Esta opción no es muy ofrecida en el mercado local, pero se está volviendo cada vez más popular y podemos pedirla como condicionante para evaluar la compra.
Luego de realizar este paso, lo recomendable es investigar con personas conocidas y en internet los comentarios de los que han adquirido este modelo. Cada vez se hace más popular tomar en cuenta los reviews de todos los artículos que compramos para ver qué tan confiables son y qué tan conforme se han sentido los que los han adquirido. Esto no es la excepción para los autos, hay un sinnúmero de información relativa a todos los modelos que nos permite dimensionar calidad, confiabilidad, seguridad y los principales problemas que han tenido los usuarios que los han adquirido previamente.
Ya habiendo agotado estos pasos, debemos evaluar la calidad del servicio post venta del concesionario local de la marca escogida, esto ya que dependiendo de qué tan ágil y eficaz sea dicho servicio, podemos conocer qué tanto tiempo permaneceremos “sin vehículo” en los mantenimientos rutinarios que regularmente tendremos que realizar; esto al igual que revisar claramente las condiciones de la garantía ofrecida, es decir, tiempo otorgado, en qué consiste y cuáles son las circunstancias o acciones que pudiesen invalidarla parcialmente o dejarla sin efecto definitivamente. Este último punto es vital ya que si por alguna razón perdemos la garantía y resulta afectada alguna pieza vital de nuestro vehículo, pues tendremos que correr con los costes de reparación que normalmente resultan ser muy costosos.
Finalmente y no menos importante es que podamos consultar el lugar de fabricación y la versión del vehículo que adquiriremos. Esto debido a que si bien es cierto que las marcas de los vehículos tienen su origen en un país determinado, los fabricantes suelen construir vehículos en plantas de producción diseminadas por distintas partes del mundo y elaboran unidades sujeto a los requerimientos y especificaciones de cada mercado. En nuestro mercado tenemos la particularidad que son importadas tanto las versiones Americanas, como las Europeas (regularmente más completas) y Asiáticas, esta situación causa que al momento de que necesitemos alguna pieza o parte a reemplazar se vuelva más simple o más complejo por esta condición, resultando casi siempre más ágil la obtención de partes de los modelos versión Americana que de los Europeos, Asiáticos o Australianos.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011