Elliott Martínez es un joven de una personalidad tranquila. De hecho, se define como tímido en las redes sociales. Celoso de su privacidad y amante de las poesías. Un profesional que ha sabido abrirse camino en los medios de comunicación como presentador de noticias y voice over de marcas nacionales e internacionales.
Elliott no es el tipo de influencer que buscó crecer en las redes sociales. Todo se dio por casualidad. Comenzó a leer noticias a los 27 años y de inmediato llamó la atención. Él era diferente, porque leía con un arete en una oreja. Sin embargo, esto no lo hacía menos profesional, simplemente, una persona que se muestra en pantalla tal como es.
Y, de un día a otro, las publicaciones de Cachicha sobre el nuevo presentador de noticias de RNN hicieron que mucha gente se interesara en conocerlo, y así comenzaron a buscarlo en las redes sociales: en ese momento se inició su historia en televisión y las redes.
“Le agradezco a la gente de Cachicha porque, atento al ‘relajito’, me ha permitido tener fuentes de ingreso en las redes sociales”, cuenta Elliott Martínez, al ser entrevistado por revista CONTACTO.
Este joven, que además de ser presentador de noticias hace voice over, estudió administración de empresas, mención Mercadeo. Hoy se dedica por entero a la comunicación y, desde hace dos años, cuenta con un podcast donde pone la voz a poesías en “La voz de Elliott”.
Elliott, estudiaste Administración de Empresas, ¿Cómo termina un administrador leyendo noticias y haciendo voice over?
“Porque previo a eso, en el bachillerato, me decían que yo tenía voz de locutor y dije: ‘el conocimiento no me pesa’. Yo soy muy curioso de naturaleza. Estudié locución y lo terminé antes de terminar el bachillerato. No usé ese conocimiento, y cuando estaba terminando la universidad, ahí hice un primer trabajo para Alina Abreu, que se llamaba ‘Historia de Amor’, que era con unos cisnes. Fue una especie de comercial lo que hice”.
¿Y a través de quién llegas a hacer ese comercial?
“Tuve contacto con una de mis mejores amigas, María del Mar Pérez, que es cantante. Ella era la productora de esa obra y yo era el asistente de producción. A mí siempre me gustó la producción y, en ese momento, yo pensaba que iba a ser productor y comencé a trabajar con ella y ella me pidió que hiciera el comercial. Hice el comercial y me gustó la experiencia. Cuando me pagaron, me di cuenta que ese trabajo no paga tan mal, pero era muy por debajo del feed. Eso fue como en el 2012, más o menos.
Después de eso, hice un demo, y en ese momento quien me dio la mano fue Raymond Jáquez, que es un locutor comercial, para mí el mejor del país a nivel de talento y a nivel de cantidad de trabajo. Es uno de los que más trabaja. Me ayudó a hacer mi primer demo y de ahí tenemos nueve años trabajando. El primer demo me hizo llegar como voz oficial de ‘Consultando’, con Ana Simó; después me contrató una multinacional y duré un año con un muy buen contrato. Luego de ahí, con los honorarios de esos trabajos, me fui a estudiar a México”.
¿Qué estudiaste en México?
“Doblaje, manejo de intención y construcción de personaje”.
¿Cómo llegas a la televisión?
“Por el voice over. Yo era la voz oficial de CDN Sport Max, que ahora es CDN Deportes. Empecé gracias a Frank Camilo, porque en la búsqueda de seguir creciendo, yo me le internaba a don Teo Veras a ver qué era lo que él hacía en la 91, y recuerdo que me tomé como un mes levantándome a las 5:30 am para estar allá a las 6:00 am y ver todo lo que hacía. Frank Camilo me estaba ‘tirando el ojo’, y a él lo proponen como presidente de CDN Sport Max, y él me sugiere como la voz oficial. Entonces, la empresa jamaiquina, que es dueña de la franquicia, me aprueba.
Estando ahí, Nuria me había dicho que le gustaba mi trabajo. Después de eso, muere Claudio Nasco, y hago mi primer casting para leer noticias, sin querer hacerlo… ¡y qué bueno que eligieron a Katherine Hernández!, porque honestamente yo no quería hacerlo.
Luego, tomo un taller con Lissette Selman y ella me dice que me estaba desperdiciando, que yo debía estar en televisión. Entonces, le dije que la única propuesta que había recibido de televisión era para leer noticias, y que yo estaba muy joven para involucrarme con un perfil noticioso, porque pensaba que me limitaba en muchas cosas. No era que yo hacía mucho desorden, pero siempre entendí el respeto que merece lo que es presentar noticias”.
¿Te limita leer noticias?
“No me limitó mucho, porque mi personalidad es muy tranquila”.
¿Cómo fue para ti leer noticias con un arete?
“Yo he sido medio rebelde con eso. En CDN, yo me sentaba con mi arete y a mí nadie me dijo nada. Llamó mucho la atención el tema del arete, por eso me hicieron muchas entrevistas porque no entendían cómo yo leía noticias con un arete y la cabeza pelada.
Eso no me hace menos serio. Yo no ando haciendo desorden en la calle, no ando emborrachándome en la calle, no estoy metido en discotecas, yo no ando promoviendo antivalores.
Yo creo que, en poco tiempo, las grandes cadenas de noticias de aquí van a tener que ser flexibles, porque el mundo está cambiando.
Y le doy gracias a Dios que caí en RNN, y a Lissette Selman, que fue la que me refirió. Yo presento con un tshirt y una chaqueta, y eso es lo que debe de ser, porque así soy yo”.
Mucha gente dice que los jóvenes no ven noticias. ¿Tú crees que las noticias están muy aburridas para los jóvenes?
“Creo que así es… ¿por qué crees que se está leyendo mucho el Brifin? Cuando uno ve la forma como ellos digieren la información, uno termina totalmente informado. Te ponen todo lo que es importante, digerido, y las cosas que son complicadas de entender te la explican. No tienen un lenguaje tan rebuscado, porque muchas veces ser sofisticado en la comunicación no te hace vender. Yo vengo de la administración de empresas y el objetivo es que se venda, y para vender, un niño de 7 años tiene que entender lo que tu estás diciendo, porque le hablas a una masa que no tiene necesariamente el acceso a una educación que le permita interpretar las cosas de manera simple. Cuando le hablas de Producto Interno Bruto, que es algo sumamente sencillo, hay que pensar cómo explicarlo de una forma diferente y simple”.
“La voz de Elliott”
Elliott tiene actualmente 32 años, y hace dos años comenzó con su podcast, en plena pandemia.
Elliott, cuéntame de @LaVozdeElliott, ¿de qué se trata?
“La Voz de Elliott es un podcast, que nace en la pandemia para entretenerme, porque tuve las dos primeras semanas (marzo 2020) con influenza, después que declararon el toque de queda, y no podía ir a trabajar. Me puse como meta romper uno de mis miedos: yo escribo poesía desde los 14 años. En realidad, es algo sumamente empírico, yo le digo poesía, pero tal vez tiene otro nombre. Hice una hablando sobre el silencio y lo subí a Instagram y tuvo muy buena acogida. Me dijeron que hiciera audiolibro, pero yo dije: ‘¿audiolibro?… eso no va a pasar’. La gente me decía: ‘Si yo oigo eso antes de dormir, me favorece’. Entonces, me di cuenta que había un nicho muy interesado en la poesía y eso me sorprendió. Después de ahí, eso fue tomando forma. Comenzó con la poesía erótica, pero la poesía erótica escrita desde una perspectiva del respeto y el uso del lenguaje de esa riqueza que tiene la lengua española. También inyectaba otras cosas que llevaban a la reflexión, al pensamiento, al enamoramiento, a la tristeza, al recuerdo, a la nostalgia. Esa fue una primera etapa; la segunda etapa la cubrí con amor, seducción y tristeza. Busqué poetas sudamericanos. Uno participó en el podcast, que es el que más me gusta, que se llama ‘El Alquimista Estupefacto’, y tres españoles. Yo los entrevisté, hice un live streaming con ellos hablando de lo que es la poesía y así el podcast se posicionó. Cada vez que sale se posiciona en el primer, segundo o tercer lugar”.
¿Dónde lo grabas?
“En mi estudio. Yo tengo un estudio personal en mi casa, lo tenía antes de la pandemia, y aproveché que en la pandemia muchos equipos se devaluaron muchísimo y lo puse mejor”.
¿Con qué equipos grabas tu podcast?
“Micrófono, tarjeta de sonido, computadora. El estudio está preparado para hacer todo tipo de grabaciones. Tengo los paneles, ¡bellísimo!… yo estoy enamorado de mi estudio”.
¿Qué pasó con ‘Así Cruje la Galleta’?
“Cumplió su etapa. Era mucho trabajo, por cómo evolucionó y a lo que evolucionó. Entonces, me di cuenta que hacer YouTube, al nivel que a mí me gusta hacerlo, con estándares de calidad, es demasiado… Hacer las cosas con calidad tiene su precio y es un precio muy grande y no estaba monetizando”.
Elliott Martínez, el influencerr
Elliott, ¿cómo es tu aceptación
en las redes sociales?
“Yo muestro lo que deseo que sepan de mí. Amo mucho la privacidad y, tal vez por eso, no tengo mejores resultados en las redes sociales. Yo tuve mi momentum, y tuve muy buena acogida en esa situación que pasó cuando la gente me comenzó a descubrir en las noticias a través de la plataforma de Cachicha, que era que lo publicaba. Le agradezco a la gente de Cachicha, porque atento al relajito, me ha permitido tener fuentes de ingreso en las redes sociales. Yo soy muy tímido en las redes. Me cuesta hacer contenido, porque no es real que uno siempre está feliz, no es real que todos los días yo quiero estar publicando. Hay muchas cosas que a mí me gustan que son para mí, y yo puedo tirar fotografía, pero no la subo”.
¿Con cuáles marcas o empresas has colaborado a través de tus redes?
“Aliss, Casa Brugal, Enoteca, Glenlivet, Café Santo Domingo, entre otras”.
¿Cuáles aplicaciones usas en tus redes sociales?
“Lightroom, FilMic pro, Video Leap, VN y Capcut”.
¿Qué equipos utilizas?
“Tengo luces Godox, de 60 watt; luces Softbox, de 33 milímetros, y un drone”.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011