Recientemente fue publicado en la prensa el sometimiento de un proyecto de ley por ante la Cámara de Diputados, en el cual se buscaba modificar la Ley 4-07 para que, en vez de permitir la importación de vehículos usados de hasta 5 años de antigüedad, permita extender este plazo de tiempo hasta 7 años.
Dentro de las interacciones que causó esta publicación en las redes sociales, hubo muchos comentarios despectivos en donde gran parte de las personas indicaba que “solo se estaba permitiendo el paso a la importación de chatarras”, sin embargo, este es un criterio en el que debemos profundizar un poco más antes de emitirlo.
Lo primero en que debemos de pensar es que, en el espectro de la vida útil de un vehículo mantenido correctamente, 7 años todavía se encuentra en el rango de antigüedad que permite un funcionamiento confiable, seguro, óptimo y muy alejado aún del denominativo de “chatarra”, asociando este término a una unidad inservible que ya agotó su vida útil de funcionamiento.
Lo cierto es que, desde mi punto de vista y en primera instancia, gran parte de estos vehículos con hasta 10 años de antigüedad, de ser depurados correctamente antes de permitirles el acceso al país, pudiesen superar con creces las condiciones del vehículo promedio utilizado en nuestro país de hasta 5 años antigüedad. Esta afirmación tiene su fundamento en el hecho del mantenimiento muy limitado que, en sentido general y por cultura, carecemos de dar a nuestros vehículos, lo cual los deja en condiciones desfavorables al compararlos con unidades utilizadas en otros países en donde aparte de la cultura de mantenimiento y buenas vías de comunicación terrestre, existen instituciones encargadas de monitorear anualmente, y de manera muy minuciosa y detallada, el estado de cada unidad que transita para poder otorgarle su respectivo permiso de circulación.
Dentro de las razones que promueven mantener los 5 años de antigüedad para vehículos importados usados, se encuentran la protección del Medio Ambiente y ahorros de divisas en compra de repuestos, sin embargo, esta condición ha venido causando todo lo contrario, ya que los dealers importadores, para poder subsistir y ser competitivos, están importando unidades que si bien es cierto se encuentran por debajo de los 5 años de antigüedad, la gran mayoría se encuentran en condiciones muy cuestionables, kilometrajes excesivamente altos, salvamentos reparados en Estados Unidos y flotillas coreanas en donde el kilometraje es idéntico, en la mayoría de los casos, a vehículos de hasta 15 años de antigüedad o más.
Entonces, ¿cuál sería la condicionante sugerida principal para permitir la importación de vehículos usados de hasta 7 años de antigüedad? Lo primero es que podamos valernos de las informaciones certificadas y disponibles en las distintas plataformas digitales confiables que, de manera internacional, permiten evidenciar el historial del vehículo en cuestión. Basado en esto, establecer unos parámetros mínimos de: kilometraje por año, cantidad de visitas de mantenimiento por año, severidad de siniestros, condiciones físicas, tanto externas como internas, y condiciones del sistema de escape y catalizadores.
Con esto podemos garantizar que recibamos unidades que, aunque tengan mayor antigüedad, puedan considerarse completamente funcionales, seguras, confiables y económicamente más accesibles al público en general.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011