Industria de cosméticos dominicana en constante innovación

Entre los países en los que se comercializan productos cosméticos  elaborados en República Dominicanaestán Estados Unidos, Haití, Puerto Rico, Brasil, Cuba, Honduras, Costa Rica, Guadalupe, Uruguay, Jamaica, Aruba, Países Bajos, Panamá, Islas Caimán, Curazao, Reino Unido, Guyana, Anguila, San Martín, Antigua y Barbuda, Chile, Kenia, Martinica, Reino Unido, Francia, Guatemala, México, Suiza, Kenia, Colombia, Trinidad y Tobago, Venezuela, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes, Italia, Honduras, Surinam, Holanda, Bélgica, entre otros.

El valor total de las exportaciones de esa industria según las últimas cifras de la Dirección General de Aduanas (DGA) sobrepasaron  los US$100 millones en el 2019.

 Para esta industria  es  clave seguir trabajando en la penetración de categorías como cuidado facial, protección solar, tinturas y tratamientos capilares, aceites esenciales para el cuidado de la piel, entre otras, sobre todo elaborados con productos naturales, sin el contenido de químicos.

De todos esos productos el reglón de mayor crecimiento son los acondicionadores, porque son los que menos regulaciones reciben a nivel internacional para poder penetrar a otros mercados.

Las mayores dinámicas en la industria de la belleza o cosméticos se presentan no solo a nivel de  marcas y canales, sino también en lo que respecta a las expectativas de los consumidores frente a las marcas, debido a que estos cada día están más informados y, por ende, profundizan su conocimiento sobre el performance de los productos y sus usos.

 Las tendencias  de cómo llevar el pelo (rizo, lacio, natural),  el maquillaje, así como el  interés por cuidar cada día más la piel empuja esa industria a innovar y diversificar  su oferta constantemente.

 El posicionamiento en las estanterías de los comercios o la forma del envase influyen en la decisión de compra. Pero la apariencia visual de los empaquetados, en la que intervienen, entre otros aspectos, el color, las imágenes o las palabras, se convierte, cuando está bien lograda, en una poderosa arma de venta.

 La industria local también ha entendido esa parte, por eso uno de los aspectos que ha mejorado es la presentación y etiquetado de sus productos. Tanto así es que empresas del sector han realizado grandes inversiones para tener sus propios moldes.

 Otros avances que han permitido el desarrollo e innovación de la industria es que se han logrado avances significativos en la simplificación y agilización de los permisos para registros sanitarios de sus productos.

 Con el objetivo de  seguir mejorando y siendo competitivos el sector tiene en carpeta un proyecto con el Ministerio de Industria, Comercio y Pymes y la Delegación de la Unión Europea en el país para el desarrollo de la cadena de valor de la industria de cosméticos nacional.  Esta iniciativa conllevará una inversión de dos millones de euros.

 Sobre este proyecto el gerente de proyecto de la Asociación de Industria de la República Dominicana, Amable Padilla, le explicó a CONTACTO que el objetivo es trabajar conjuntamente con todo el sector, es decir empresas grandes, medianas y pequeñas empresas.

 Los  ejes que se trabajarán en el proyecto son calidad, acceso a mercado, innovación, fuente de financiamiento y todo lo relacionado a la parte ambiental.

 Mientras que  la presidenta del Clúster de Belleza Dominicano, Rommy Grullón, destacó el crecimiento que viene registrando la industria de la belleza dominicana,  lo  implica ajustarse a los estándares más altos para seguir desarrollándose en un segmento de mucha competencia a nivel internacional.

 El Clúster ha sido clave en los últimos años para la industria. Esta iniciativa es el resultado del Programa “Innovación Industrial: Compitiendo en Rapidez y Flexibilidad” que desarrolló la AIRD (2008-2012) realizado con fondos provenientes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

 El  objetivo general ha sido contribuir a mejorar la competitividad de los clústeres del sector industrial exportador dominicano, desarrollando e implementando un modelo de negocios basado en la rapidez y la flexibilidad, mediante la conformación y desarrollo de clústeres.

 Fruto del programa de innovación industrial se logró caracterizar el sector de productos de belleza, logrando contabilizarse un universo conformado por unas 150 empresas. Estas distribuidas entre el sector formal e informal compuesta por 15 grandes, 15 medianas y unas 120 pequeñas empresas, las cifras manejadas por el Clúster reflejan 193,500 empleos directos generados por el sector distribuidos en 3,500 fabricantes, 150,000 salones de belleza; y 40,000 en otros.

 La AIRD juntamente con el Clúster Dominicano de Productos de Belleza, ejecutó posteriormente (2012-2013) el proyecto “Diseño, Desarrollo e Implementación de una Estrategia Global de la Calidad del Clúster Dominicano de Productos de Belleza”. Las actividades que se realizaron en el marco de esta consultoría (y que se pueden enunciar como caso de éxitos) fueron las siguientes: I) el diseño e implementación de una estrategia de Calidad del Clúster, II) el diseño de un Sello de Calidad que fue otorgado a 11 laboratorios del clúster el sello de calidad.

 A lo largo de todos estos años (2008-2018), la visión del Clúster Dominicano de Productos de Belleza es la de ser un sector moderno, competitivo, fuerte, cohesionado y con un peso importante en la economía y sociedad de República Dominicana, funcionando como un “sistema” que agrupe a toda la cadena de valor industrial del sector de la belleza.

 Dentro de sus miembros están las dos principales asociaciones de productos cosméticos como son: Asociación de Fabricantes de Productos del Cuidado Personal (AFAPER) y Asociación de Pequeños y Medianos Fabricantes de Cosméticos (APYMEFAC).

Impacto salones de belleza

 Los renglones productivos que inciden de manera directa e indirecta en el sector de productos de belleza son los fabricantes, distribuidores, importadores, suplidores de materia prima y embalaje, beauty supply, tiendas en grandes superficies (retail), ventas casa por casa, pero son los salones de belleza los principales impulsores