Lee Geady Mateo Ramírez: La primera mujer dominicana en comandar un escuadrón de transporte aéreo

Lee Geady es oriunda de las Matas de Farfán, San Juan de la Maguana, pero creció en Santo Domingo Este junto a sus abuelos, debido a que sus padres trabajaban en Santiago. 

La comandante del escuadrón ingresó a la academia motivada por una amiga del colegio y, que a pesar de todas las vicisitudes que se pudieron presentar en el camino, asegura que jamás se rindió hasta ver su meta de convertirse en piloto. 

Tras cuatro años de preparación en la Academia Militar Batalla de las Carreras, ingresó a la escuela de aviación de la Fuerza Aérea de República Dominicana, en el año 2007, egresando como piloto aviador al siguiente año. 

“Yo ingresé a la FARD inspirada por un grupo de nueve compañeros de segundaria, de las cuales solo dos culminaron la formación militar. Pero yo seguí adelante. Ser piloto es un honor y una de las mejores decisiones que ha tomado en su vida”. 

Cuando terminó su entrenamiento básico de piloto aviador, optó por inscribirse en el escuadrón de transporte, donde se convirtió en la primera mujer del escuadrón de transporte aéreo y única capitán de nave del país. 

“Ser comandante de la unidad de vuelo es un sueño avalado en el ejemplo que me dieron mis padres y abuelos, del trabajo duro y honrado. Mi labor está inspirada en Jesús, quien aprendió a darlo todo por los demás”, asegura Geady.

En la hoja de vida de Lee Geady, cuenta con diferentes especialidades en países como; Guatemala, España y Estados Unidos. También, fue oficial de Operaciones Aéreas del sector Oeste de la Misión Multidimensional Integrada para la Estabilización de las Naciones Unidas en Malí, África, misión que calificó como uno de los retos más grandes de su carrera.  

De la misma forma, Mateo Ramírez asegura que su designación “significó un voto de confianza hacia el personal femenino y hacia la igualdad de género. Busco ser una comandante líder para mi escuadrón. Esta designación demostró que las capacidades de un profesional no varían entre sexos, sino entre personas”. 

“Esta carrera está llena de retos. Chequearse de cada aeronave es un reto, requiere entrenamiento y disciplina. En la actualidad, realizo vuelos en ocho aeronaves diferentes, y cada una de ellas tiene sus requerimientos. Mantenerme pro eficiente en cada una de ellas, al momento que me toque volarlas, es reto constante. Chequearme de capitán de la aeronave de mayor peso que tiene la FARD, es uno de mis más grandes retos, pero a la vez uno de mis más grandes logros en mi carrera”.