María Boyero: Una creadora de sonrisas

Cuando comenzó la pandemia en República Dominicana (19 de marzo de 2020), todos nos encerramos en nuestras casas buscando en qué entretenernos… 

Durante ese tiempo, María Boyero, como la mayoría, hacía lo mismo en su residencia, pero encontró otra manera para distraerse y, a la vez, entretener a otros: haciendo personificaciones en Tik Tok. 

Su gracia y carisma comenzó rápidamente a cautivar a sus seguidores en esta red social, quienes no solo veían sus divertidos videos, sino que también los compartían y comentaban diariamente. 

En solo un año, María pasó de ser una odontóloga de profesión, con una vida privada normal, a una Influencer seguida ahora por más de 170,000 personas en Tik Tok, y 84,000 en Instagram. 

Aunque ella -asegura- no buscaba notoriedad, se la ganó con creces. Hoy, esta profesional de la salud dental ha participado en una película, ha sido contratada por diversas empresas para que promocione sus productos o servicios, y está enfocada en seguir entreteniendo a las personas, que buscan en ella la forma de olvidar el estrés del día laboral y terminar la noche con una sonrisa en su cara. 

Aunque su fuente principal de ingresos es a través de su profesión, María asegura que si se le dedica el tiempo se puede vivir de las redes sociales, y aunque muchos no lo crean, “no es tan fácil como aparenta”, explica esta joven, entrevistada por revista CONTACTO en el parque Iberoamericano de La Esperilla. 

María, ¿Cómo comenzaste a crear videos para Tik Tok?

“En la pandemia, por la falta de oficio… (Risas). Tenía unas amigas que me repetían mucho, me decían: ‘Esa aplicación se parece a ti. Ahí tú puedes hacer cosas chulas y te quedarían súper bien’. Les hice caso y se ‘regaron’ los videos. Yo los hacía para matar el tiempo, porque nadie estaba haciendo nada, porque estábamos todos ‘trancados’. En Tik Tok tú tienes gente que baila, gente que hace challenge de actuación, tienes gente que hace lo que yo hago, que es imitar audios de humor… y así comencé”. 

El crecimiento de tus redes sociales fue muy rápido. ¿Has tenido tiempo de asimilar todo lo que está pasando contigo?

“Me ha costado adaptarme a este estilo de vida, porque es bastante rápido, bien ajetreado. No como mi estilo de vida de antes, que me iba al consultorio y me devolvía para mi casa. A mí, lo que me ayudó a ese crecimiento tan rápido, fue que, literalmente, un país completo estaba en su casa haciendo nada… con el celular en la mano, atento al teléfono, revisando noticias de la pandemia y también buscando en qué entretenerse, porque la verdad es que la estábamos pasando muy mal”. 

¿Cómo haces para que tus imitaciones se vean tan reales?

“Practicar. Escucho el audio y lo repito hasta que me salga bien”.  

¿Cuánto tiempo tienes que practicar para que un video te salga bien?

“Depende. Si el audio es largo o la persona habla muy rápido, todo depende… Me puede tomar desde 20 minutos hasta una hora”. 

¿Cuándo te diste cuenta que más que un entretenimiento, Tik Tok e Instagram se estaban convirtiendo en una fuente de ingresos para ti?

“Cuando las marcas comenzaron a acercarse. Pasaron varios meses desde que comencé a hacer los videos hasta que se me acercó la primera marca. ¡Yo no entendía absolutamente nada!… Me pidieron un tarifario y yo no tenía eso, no sabía cuánto costaba un post y no sabía que un post y un story tenían precios diferentes. ¡Yo no sabía absolutamente nada!, y tuve que asesorarme. Ahí fue que me puse en contacto con Evelyn Medina, que es actualmente mi manager. Ella es la que se encarga de todo eso, ella fue la que me asesoró”.  

¿Cuál red social prefieres: Tik Tok o Instagram?

“Son diferentes, porque en Tik Tok tú puedes ser tú, independientemente de todo… y si no quieres ser tú, ¡no seas tú! O sea, Tik Tok te da la libertad de ser quien tú quieras. Como hago yo con los videos, dependiendo del personaje que me dé risa, pues me convierto en esa persona. Pero en Instagram, tú puedes compartir con una comunidad bien grande eso que te gusta. Además, la gente puede ver quién tú eres, con los story, los live, los comentarios. Tú interactúas más con el seguidor. Tik Tok te limita más”.  

María, la profesional dental 

Hablemos de ti. Tú eres odontóloga. ¿Dónde estudiaste odontología?

“Me gradué de la UNPHU”. 

¿Qué te dicen tus pacientes cuando te ven en Tik Tok?

“Hay algunos que se ríen muchísimo, que me dicen que les saqué una sonrisa durante la pandemia; que ‘que bien lo hago’… ¡Que nunca se lo imaginaban!, porque en el consultorio yo soy otra persona. Soy una profesional que está ahí para ayudar. Hay muchas personas que llegan muy aprehensivos, por lo que tú no puedes entrar ahí con un chiste. Una es una gente en su área laboral, pero que también tiene su personalidad, su forma de ser y que no tiene porqué cambiar por lo que hace. Yo puedo ser chistosa, cómica, interpretar bien un audio, crear bien un personaje, pero también puedo ser buena en mi profesión. Tú lo puedes ser todo”.  

Muchas personas piensan que la vida de un influencer es fácil. ¿Tu crees que es así?

“Yo no te puedo explicar el trabajo que se pasa en esta área de redes sociales. ¡No tienes hora!… Tienes que estar dando ‘bandazo’ en la calle a cada rato; tienes que crear un contenido que complazca al cliente, que complazca al seguidor y que se adapte a lo que tú eres. Encima de eso, tienes que estar generando ideas y utilizando tu creatividad 24/7, literalmente. Son tantas las cosas, que la gente no entiende lo difícil que es esto. Para mí, es menos complicado ir al consultorio todos los días que esta vida”.

¿Siempre has sido una persona con sentido del humor?

“Desde siempre. Mi familia completa es así, de los dos lados de la familia somos así. Hay un lado de la familia que son un poco más pesados, que son un poco más sarcásticos. Por ejemplo: del lado de la familia de mi mamá, siempre tienen un chiste, siempre tienen un come back gracioso, de lo que sea. Del lado de mi papá, tienen un sentido del humor más pesado, más sarcástico, más burlón. Nosotros somos una familia de bullies, como quien dice. Siempre nos vivimos relajando, siempre nos vivimos burlando uno del otro y mi familia que está fuera es peor todavía”.  

¿Cuándo te diste cuenta que eras graciosa?

“¡Ahora!… porque esta persona que ustedes están viendo ahora yo siempre lo he sido, la vida entera, lo que pasa es que yo no sabía que podía entretener a masas al mismo tiempo. Yo lo que pensaba era que como mis amigos sabían como es mi personalidad, se reían. Ellos me decían: ‘Tu hasta contando algo serio das risa’. Quizás es por mis expresiones faciales, quizás es por los disparates con los que salto, pero yo no sabía que podía entretener a tantas personas al mismo tiempo… Tampoco sabía que lo de los personajes iba tan bien”. 

Cuándo sales a la calle, que la gente se te acerca y te saluda. ¿Cómo te sientes con esto?

“!Es una ‘chulería’!… Me piden fotos o me preguntan cosas sobre lo que hago y yo me tomo el tiempo de responderles, porque ellos se toman el tiempo de verme, ¡y qué bueno que lo disfrutan!, y ¡qué bueno que yo pueda aportar un poco de felicidad en el momento que me están viendo!”. 

¿Se puede vivir de las redes sociales?

“Sí, se puede vivir de las redes sociales, hay que ponerle mucho empeño y dedicarle mucho tiempo. Yo diría que 24/7, pero sí se puede vivir dedicándole mucho tiempo”. 

¿Con cuáles marcas trabajas?

“Son varias, estoy trabajando con El Catador, Avene, Morocanoil, Rexona, la aplicación Hugo, Banco de Reservas, son varias… gracias a Dios”.  

¿Son exigentes las marcas para trabajar?

“Algunas más que otras, pero lo que tú tienes que tener claro es quién tú eres. Eso no puede cambiar, porque se te va a hacer más difícil. Además de complacer al cliente y al seguidor, se te va a hacer mucho más difícil mantener un personaje tanto tiempo. Tú tienes que ser tú y lo que te salga a ti trata de amoldarlo para complacer a los dos bandos”. 

¿Trabajas tu contenido con tu celular?

“Sí, todo el contenido lo trabajo con mi celular, menos el contenido que son fotos más profesionales, de marca. Cuando es para marcas, yo trabajo junto a una empresa que se encarga de la creación del contenido, filmación y edición de los videos. Al principio, lo hacía yo sola, pero se volvió mucho y necesité ayuda”.

¿Cuéntame de la película en la que participaste?

“Sí, me dieron la oportunidad de participar en una película. Me dijeron que hiciera el casting, lo hice y me eligieron, gracias a Dios. Yo tuve dos días de rodaje nada más, que fueron dos días bastante intensos, pero fue una experiencia súper ‘chula’ y ojalá me sigan llegando ese tipo de trabajos”. 

¿Cómo se llama la película?

“Infatuared, todavía no ha salido. Están en la postproducción, fue un trabajo muy interesante… Yo hice un papel pequeño, secundario, casi terciario, pero me gustó y ojalá me sigan llegando oportunidades así”.

¿Quién fue la primera persona que te llamó que quería hacer una colaboración contigo?

“Carlos Durán. Él me contactó por Instagram y me dijo para hacer un dúo con los personajes de la Escuelota. Esa fue la primera colaboración que hice”.

¿Ustedes eran amigos?

“No, hasta el sol de hoy, todavía no lo he visto en persona”. 

¿Te gusta hacer colaboraciones?

“Claro, yo lo que trato es que vayan conmigo. Trato de no trabajar en colaboraciones, ni con marcas que yo no consuma, porque es más difícil pretender que utilizas X producto o que eres de esa línea de persona, o ese personaje que tú no eres. Yo trato de mantenerme con lo que me sienta cómoda, me guste y consuma, porque sino es muy difícil”. 

¿Qué te dice tu familia?

“La generación más adulta no tiene Instagram, pero siempre me piden que les mande los videos para ellos reírse. Luego, mi familia, que son usuarios de redes sociales, sí lo ven, pero yo sigo igual, no he cambiado”.

¿Has tenido contacto con Nany Peña?

“Una vez coincidimos en una entrevista en Chévere Night con Milagros Germán y la conocí. Me encantó, sumamente agradable, nunca había tenido contacto con ella y ese día pude tener un ratico con ella. A ella le encanta ver esos videos de las personas que la imitan y se ríe muchísimo. Ella llegó a publicar dos o tres en sus redes sociales”.