El superintendente de la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL), Miguel Ceara Hatton, acaba de cumplir cinco meses en la institución, luego que, en solo cuatro años y medio, estuviera al frente de los ministerios de Economía, Planificación y Desarrollo, y de Medio Ambiente. Hoy dice estar satisfecho, reconociendo la institucionalidad de SISALRIL, consiguiendo resultados, trabajando coordinadamente con todos los actores del sector: “los prestadores de servicios, el financiamiento de los servicios de salud y la población beneficiaria. También trabajamos en el ámbito del gabinete de salud, que preside la señora Vicepresidenta”.
Para aquel que no frecuenta a Miguel Ceara Hatton, se ha perdido de conocer a un profesional y un funcionario público excepcional. Una persona que ama a su país, y que, desde hace más de cuatro décadas, se ha dedicado a estudiar e investigar sobre macroeconomía, desarrollo económico, teoría económica, políticas públicas y política internacional.
Es egresado de Economía, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), de México. Ha tenido como áreas de investigación el desarrollo económico dominicano y del Caribe, y ha sido consultor para organismos nacionales e internacionales, tanto del sector público como privado.
Es decir, estamos hablando de alguien que es una autoridad en múltiples áreas económicas y sociales de República Dominicana y el Caribe, pero además de todo esto, es una persona extremadamente honesta, transparente, y que siempre busca resultados. En palabras más claras y simples: un servidor público de lujo, que cualquier país se enorgullecería de poseer.
Para conocer lo que está haciendo en la Sisalril, su tercer cargo público en 4 años y medio de gestión del actual Gobierno (único funcionario que ha estados en tres instituciones), revista CONTACTO lo entrevistó para nuestra sección Business From Cappuccino, en el restaurante Il Cappuccino, de su propietario Claudio Paccagnella.
Cinco meses en la Sisalril
Don Miguel, ¿cómo han sido estos cinco meses al frente de la institución?
“Bien, es un aprendizaje para conocer los detalles de una institución que se ocupa de la regulación del aseguramiento en salud y riesgos laborales garantizando que sea equitativa, de calidad y sostenible. Como nosotros somos un órgano regulador, tenemos que interactuar con los actores del seguro familiar de salud, con el compromiso de proteger los derechos de la población afiliada”.
¿Cuáles son esos actores?
“Primero, la población dominicana, es decir, los 10.5 millones de personas afiliadas a diciembre de 2024 que recibe los servicios de salud, el 45.0% lo hace a través del Régimen Contributivo y el 54% a través del Subsidiado y en adición un 1% de los pensionados y jubilados del gobierno.
En segundo lugar, la Tesorería de la Seguridad Social (TSS) que recibe las contribuciones de los empleados y empleadores, incluyendo al gobierno que cubre al subsidiado. Tercero, las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) que les pagan a los prestadores de servicios de salud, tanto privados como públicos, incluyendo a las ONG que prestan servicios de salud como Rehabilitación, Dermatológico, entre otros.
En adición, Sisalril interactúa con el Ministerio de Salud Pública como el rector del sector, con la Dirección General de Información y Defensa de los Afiliados (DIDA), y el Programa de Medicamentos Esenciales (PROMESE/CAL).
Es en coordinación con todos ellos, que actuamos para garantizar un mejor servicio, al menor costo posible, y más eficiente para la sociedad. Es decir, garantizar la sostenibilidad financiera y social del sistema de salud. Financiera, porque hay que disponer de recursos para pagar los servicios de salud y social porque hay que garantizar que toda la ciudadanía se beneficie de los mejores servicios de salud”.
¿Qué relación hay con el Seguro de Riesgos Laborales?
“Sisalril actúa como un órgano regulador del Seguro de Riesgo Laborales, es decir lo supervisa, monitorea y controla. También dentro de las funciones está la atención a reclamaciones por prestaciones de salud y económicas que otorga el Instituto Dominicano de Prevención y Protección de Riesgos Laborales (IDOPPRIL)”.
¿Cómo opera el régimen contributivo y el subsidiado?
“El punto para distinguir ambos regímenes es la forma de financiamiento. En el régimen contributivo, el financiador es el empleado y el empleador, que transfiere esos recursos a la Tesorería de la Seguridad Social y de ahí pasa a las ARS en forma per cápita. La ARS contrata a una red de prestadores (médicos, clínicas, farmacias, laboratorios, etc.) para satisfacer las necesidades de salud de la población, según el catálogo de servicios.
Por otra parte, está el Régimen Subsidiado, que incluye a los trabajadores que no tienen capacidad de pago y a los desempleados que son atendidos con recursos financieros del Estado a través de la ARS Seguro Nacional de Salud (SENASA)”.
Una pregunta, entonces, si el gobierno es quien paga por la salud de más de la mitad de la población, ¿solamente es atendida en la red pública de hospitales?
“En principio, la red pública del Servicio Nacional de Salud (SNS) debe proveer la atención, sin embargo, si por alguna razón el servicio no está disponible, entonces la persona puede acudir a la red privada y SENASA debe cubrir el costo del servicio de la red privada contratada”.
Después de haber pasado por 3 instituciones en 4 años y medios, ¿cómo valora la experiencia?
“Ha sido una oportunidad para entender y reflexionar sobre la complejidad del Estado. El hecho de estar en dos ministerios de naturalezas tan diferentes, y ahora en un órgano regulador, realmente da una experiencia que permite conocer cómo funciona el Estado Dominicano. Podría citarte cuatro temas que me preocupan y entiendo que es necesario buscar nuevos equilibrios.
El primero, tiene que ver con la salud.
La salud, de acuerdo a nuestra constitución es un derecho del pueblo dominicano, pero al mismo tiempo es una mercancía con la que se negocia. El proveedor del servicio, es decir, el médico, la clínica, el centro de diagnóstico, etc. lo mira como un negocio, aunque hay sus excepciones muy notables. Pero para el Estado y la población, estar en salud es un derecho.
En una sociedad como la nuestra este dilema es difícil de resolver y requiere buscar nuevos equilibrios entre la voracidad de algunos proveedores del servicio y los intermediarios que quieren aprovecharse del Estado, aunque reitero no todos, y el Estado que debe garantizar la materialización del derecho ciudadano de la salud. Es difícil…
Un segundo tema es la complejidad de los procesos y la burocracia de Estado, muchas veces, aunque tengas los recursos humanos y financieros para hacer alguna actividad propia de tu función debes atravesar un complejo proceso que exigen las leyes y que hace prácticamente imposible alcanzar el propósito buscado. Hay que producir algunos cambios revisando esas leyes; como, por ejemplo, en las compras públicas, la ley 340-06.
Tercero, la cultura laboral. Hay colaboradores desmotivados, que no dan todo el esfuerzo que se debería.
Finalmente, el miedo de los empresarios de denunciar actos indelicados. Muchas veces recibí quejas y confronté a funcionarios que habían tenido un comportamiento dudoso con un empresario. El empresario se atemorizaba y lo único que podía hacer era desvincular al funcionario, pero no se pudo actuar en la justicia porque el denunciante se atemorizaba.
Hoy tengo claro e identifico algunas cosas que deberían cambiar para tener un Estado más eficiente. Tengo la confianza de que así ocurrirá en la medida que se dignifique el funcionario público”.
Sin duda, el Presidente tiene una confianza ciega en usted…
“Bueno, trato de responder a esa confianza. Soy parte de este proyecto político y me siento completamente identificado. Mi responsabilidad ahora es responder a la confianza haciendo todo lo que deba hacer en la Sisalril, para garantizar y fortalecer la sostenibilidad financiera y social de la Seguridad Social en salud”.
Usted viene con 18 iniciativas para su gestión. ¿Esas 18 iniciativas serían su prioridad?
“Sí, efectivamente, estás prioridades reflejan las prioridades de gobierno, las cuales están incluidas en nuestro programa de gobierno. Son líneas de trabajo que han sido expuestas en diferentes escenarios por el propio Presidente de la República, por el Gabinete de Salud, por la Sra. Vicepresidenta, y que se han sistematizado.
También fue el resultado de las discusiones y reflexiones que de manera conjunta realizamos en Sisalril con el excelente equipo de profesionales de la institución. Este equipo tiene un amplio conocimiento del funcionamiento del sistema de salud en general, y de la seguridad social en particular.
Tercero, de las experiencias que he adquirido en el tema, fruto de mi trayectoria profesional en funciones públicas”.
¿Cuál es tu experiencia en el sector salud?
“En la década del 80 y 90 fui parte de una red de economistas de la salud que se movió por América Latina y realizó investigaciones sobre el tema. También, actúe como consultor para OPS, para UNICEF y otras instituciones del Sistema de Naciones Unidas, sobre todo, en la problemática del financiamiento de la salud. En la década del 2000 me tocó dirigir los informes de desarrollo humano del PNUD en el país, donde el tema salud fue un eje central. Trabajamos diagnósticos, metodologías, estrategias para el país”.
¿Podría compartirnos cuáles son las principales prioridades de su gestión?
“Mejorar la cobertura, la eficiencia del servicio de salud, garantizar la sostenibilidad financiera y social del servicio de salud, fortalecer la atención primaria, fomentar el uso de genéricos, atender programa de medicina de alto costo, reducir el gasto de bolsillo de las familias. Transparentar los procesos de afiliación y el traspaso entre las ARS para garantizar la libre elección. En fin, son medidas conocidas y factibles”.
¿Cuáles otros ejes de trabajo entienden que son relevantes destacar?
“Un tema importante es el gasto de bolsillo en salud, cuya situación es tremendamente preocupante. Para que tengas una idea: una familia gastaba en salud al año 2022, en promedio, unos 4,208 pesos mensuales por hogar, donde el 53.9% de ese gasto, era gasto de bolsillo, según datos del Banco Central. Pero aún más preocupante es que el 55.3% de los gastos de esa familia en salud, es en medicina.
Hay que lograr reducir los gastos en las farmacias, utilizando genéricos y hay que reducir ese gasto de bolsillo para que la gente pueda estar cubierta realmente por el seguro.
Un tercer tema de gran relevancia es la afiliación efectiva de la población al seguro familiar de salud, a través de régimen subsidiado o del régimen contributivo. Aunque hoy la afiliación total casi alcanza el 98% de la población, pero todavía hay un 25% que no sabe que está afiliado”.
Relaciones con actores del sistema de salud
Don Miguel, trabajar con el Colegio Médico supongo que no es tan fácil como se cree. ¿Cómo han sido las conversaciones con ellos en estos primeros cuatro meses?
“Muy bien. Ellos están muy conscientes de nuestro rol como regulador, al igual que los otros actores.
Hasta ahora, no hemos tenido conflictos con ningún sector, aunque si hemos tenido diferencias. Sin embargo, hemos conversado y armonizamos conclusiones”.
¿Cómo es su relación con el sector de las ARS? ¿Se reúnen cotidianamente?
“Nos hemos reunido mucho a discutir situaciones. Ellos defienden su negocio, lo entiendo perfectamente, pero he visto un compromiso y a todo el mundo preocupado por garantizar que el sistema funcione”.
Los jubilados, el SFS, SEMMA y SENASA
Don Miguel, ¿qué piensan hacer con la protección de los jubilados?
“Mejorar el acceso a los servicios de salud y la protección de la población jubilada, es un tema prioritario.
Aquí en la República Dominicana se ha llegado al absurdo de que una población jubilada pierde el seguro de salud cuando más lo necesita. Entonces, el gobierno, actuó en ese sentido, otorgando una asignación especial de RD$2,400 millones anuales a la población que estaba jubilada por el gobierno.
Hay que buscarle la vuelta para los jubilados y pensionados en el sector privado”.
Usted decía algo muy importante, el seguro familiar de salud es uno de los instrumentos claves para poder seguir garantizando el derecho a la salud de la población. En este 2025, ¿cómo se seguirá mejorando?
“Yo te diría que, a este momento, he apreciado que hay varias áreas que se pueden mejorar para dar más eficiencia al sistema. Por ejemplo, ¿cómo poder bajar costos? ¡Eso es fundamental!, y un gran reto. Por ejemplo, para bajar costos por el uso de medicamentos genérico. También hay que continuar trabajando en los riesgos, al enfrentar la siniestralidad en función de los riesgos por sexo, edad, enfermedad. Otra área es la de medicinas de alto costo. En fin, hay áreas que todavía se pueden mejorar mucho más, y eso es trabajar en la eficiencia”.
¿Cómo se puede seguir mejorando los servicios de las ARS del CMD, SEMMA y SENASA?
“Hemos tenido diversas reuniones, al igual que con el CMD. Ellos están en una situación complicada, pero nos plantearon una serie de acciones que están tomando, y ha habido mejoría. También ahora se están tomando una serie de acciones, donde el Ministerio de Salud va a apoyar. En fin, se van a dar algunas situaciones que presentan una mejor perspectiva de esas ARS.
La ARS del CMD presenta una situación financiera estable. SEMMA ha mejorado y recibe apoyo del Ministerio de Educación.
La ARS SENASA tiene afiliado a las personas del régimen subsidiado y es la ARS que más afiliados tiene en el régimen contributivo y es una institución que está haciendo las cosas bien, y puede hacerlas mejor. Nosotros podemos trabajar en apoyar a que sea mejor”.
Compromiso con la transparencia en el uso de los recursos públicos
Hace poco, firmaron un compromiso de integridad y prevención de corrupción administrativa de la DIGEIG. ¿Por qué lo hizo?
“Sí, mira, la ciudadanía tiene derecho a saber lo que se está haciendo, las decisiones y medidas que se toman. Debe haber transparencia”.
Cesantía laboral
Don Miguel, hoy tenemos un tema que está muy en el tapete, y es la cesantía laboral. ¿Cuál es su opinión al respecto?
“Las leyes no son para ‘persécula seculorum’, tienen una fecha de caducidad, tienen que adaptarse a los cambios en el contexto. El código de trabajo es de 1992, y desde ese año para acá, ha cambiado mucho el mercado de laboral. Y esos cambios implican una adecuación de la normativa.
Por ejemplo, apareció el trabajo digital remoto. Incluso, hoy se debe reconocer el trabajo doméstico. O sea, los cambios en el mercado laboral en los servicios y otros sectores económicos de algún modo, tienen que recogerse en una legislación. La cesantía es un derecho adquirido, y lo que debe resolverse es si va a ser un seguro de desempleo u otro mecanismo”.
El futuro del PRM
Don Miguel, ¿cómo ha sentido estos cuatro años de gobierno, desde todos los puntos de vista que usted haya podido estar al frente, pues tiene una perspectiva totalmente diferente a la mayoría?
“Yo tengo una visión de la política. Por tanto, la política la asumo con honestidad.
El gobierno del presidente Abinader ha logrado mejorar la condición social de la población, al tiempo que promueve la inversión privada.
Enfrentó la pandemia exitosamente, logró una rápida recuperación económica, aumentó el nivel de empleo, mejoró la distribución del ingreso, mejoró la política social, ha sido el gobierno que más y mejor ha intervenido en el territorio, llevando el desarrollo donde reside la gente y por último, eso se ha logrado abriendo espacios y oportunidades en el sector privado.
El PRM tiene un gran futuro, si nos mantenemos unidos, si hacemos un gobierno de calidad y una política ética. Si tenemos una visión de futuro y planificamos a largo plazo. Debemos superar esa cultura política tradicional del ‘sálvese quien pueda, el resuélveme lo mío, te sale lo tuyo’.
Yo soy parte del PRM, soy fundador, estuve desde que se concibió la idea. Empujo junto con muchos otros compañeros la idea de que la ética debe llegar al poder, hemos avanzado, pero indudablemente falta mucho.
Como partido tenemos el reto de continuar avanzando en fortalecer la institucionalidad, hacer una política diferente a la tradicional, más transparente, honesta y eficiente, que responda a los retos que tenemos como nación de mejorar la calidad de vida de su gente, y evitar que surja un aparecido que retroceda en la consolidación de nuestra democracia y el desarrollo de nuestra institucionalidad. Y en este contexto el partido político es esencial, por una razón muy simple: el desarrollo es una cuestión de poder, aunque debería ser una cuestión de derecho”.
¿Cómo está hoy el PRM?
“Yo creo que tiene retos por superar del pasado, lo ha hecho en parte, y el Presidente es la mejor expresión de ese cambio. Creo que el presidente Abinader es un hombre honesto, serio, y hay funcionarios honestos y serios. Pero todavía hay funcionarios, y mucha gente, que cree que la política es ‘búscame lo mío o te sale lo tuyo’; y mientras eso siga así, nos estaremos igualando con lo que había en el pasado. Nosotros creamos una alternativa, un partido político diferente para separarnos del pasado. Y si no damos muestras suficientes, podríamos caer en lo mismo que el pasado”.
¿El PRM puede mejorar la calidad de vida de los dominicanos?
“En eso estamos. Los partidos políticos tenemos la capacidad para luchar por mejorar la calidad de vida de la gente. En este gobierno se ha hecho un esfuerzo grande para mejorar la calidad de vida de las personas, aunque falta mucho todavía, pero ha habido avances”.
¿Vienen los mejores cuatro años del gobierno del PRM?
“Yo espero que sí, pero como dice el dicho, ‘una cosa es lo que piensa el burro y otra el que lo apareja’… Entonces, yo espero que sí, que podamos hacer un mejor gobierno”.
Su legado de funcionario, de ciudadano, de padre
Don Miguel, si pudiéramos decir, qué legado le gustaría dejar en la Sisalril, ¿cuál sería?
“Dejar más fortalecido el aseguramiento en salud y riesgos laborales en materia de sostenibilidad y de la eficiencia financiera y social, a fin de garantizar el acceso de la población a los servicios de salud; entiendo que hay espacio para hacer más eficiente ese sistema. Se ha identificado claramente lo que hay que hacer, y lo haremos. Sé por dónde debemos ir para mejorar la eficiencia financiera. No sé si toda la agenda completa se pueda hacer, aunque creo que la agenda también va a ir evolucionando.
Trabajar para la eficiencia financiera va a generar perdedores y ganadores, pero el sistema va a funcionar y va a ser estable. La responsabilidad mía, mi preocupación, es la sostenibilidad financiera y social del seguro familiar de salud. Esa es mi responsabilidad. Y para eso, estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario, porque es un servicio al país”.
¿En qué momento de su vida personal y profesional se encuentra hoy Miguel Ceara Hatton?
“Tengo 71 años, me siento bien. Mi vida personal bien, abuelo, casado. Hago ejercicio, pero desafortunadamente no puedo hacer mis largas caminatas. La última que hice fue en 2019, de 37 días y
1,007 km.
He vuelto a dar clases de economía dominicana, apenas 3 horas a la semana en la PUCMM, no tengo tiempo para más. Lo cual me proporciona un espacio en la agenda para reflexionar sobre el proceso de desarrollo del país. Evaluar ese conjunto de decisiones diacrónicas que impactan el presente en forma sincrónica, generando una institucionalidad y una dinámica social que condiciona el proceso de desarrollo”.
¿Qué le falta por hacer?
“Tengo la idea de escribir un libro nuevo, sobre el desarrollo de largo plazo de la economía dominicana… Volver a las largas camitas de un mes o más. Ver a mi país encaminándose por una senda de desarrollo con claros indicios de mejoría de la calidad de vida de las personas. En fin, gozar de la vida que me queda”.
Forma de pago: transferencia o depósito en el banco BHD León a la cuenta 27190380011