Miosotis Batista: Una correcaminos por el medio ambiente

Cada buena acción vale la pena y eso Miosotis lo tiene claro. No dejar basura en los lugares que visita, evitar el consumo de plástico de un solo uso y reducir su huella de carbono son algunas de sus metas y poco a poco las cumple.  

De la misma forma, estimula a sus seguidores en Instagram a hacer lo mismo. Sin embargo, su amor por el medio ambiente no se queda en las redes sociales, lo vive en su día a día.  

Miosotis conduce un vehículo eléctrico, tiene una tienda donde vende provisiones a granel y utensilios para sustituir el plástico, además del trabajo de concienciación que hace a través de su revista Tinglar. Ella encontró en su pasión una forma de vivir sostenible.

Miosotis es Comunicadora Social de profesión y madre de Eidan Luis. La llegada de su hijo se convirtió en el momento más bonito de su vida y el más difícil. Estuvo un mes en cuidados intensivos con un prederrame cerebral, tras sufrir eclampsia. Hoy, esa historia quedó atrás y Eidan Luis y Luis Fernando, su esposo, cada vez que pueden, la acompañan en sus escapadas fuera de la ciudad.

Así como luchó por su vida mientras se mantuvo en cuidados intensivo, así es Miosotis: una luchadora que no se da por vencida y que siempre se está reinventando.  

Miosotis, tú eres comunicadora de profesión, ¿cuéntanos de tus inicios en esta carrera?

“De profesión soy licenciada en Comunicación Social, egresada de la Universidad Autónoma de Santo Domingo; Técnico en Hotelería-Turismo, graduada en La Perito y en proceso de cursar maestría en Ciencias Ambientales… claro, si la pandemia me deja (Risas). 

Empecé en los medios de forma muy curiosa. Cuando me tocó hacer la pasantía, mi maestra me dijo: ‘Tenemos un convenio con Telesistema, canal 11, puedes ir a ver que tienen disponible’. Yo, muy osada, investigué que el coordinador era Miguel Febles, así que llegue al canal y dije: ‘quiero ver al Sr. Febles, dígale que Miosotis Batista le busca’. La recepcionista me vio tan segura que debe haber pensado que yo lo conocía, y le fue a buscar… (Risas). 

Febles vino a la recepción y me presenté. Le dije que era estudiante y necesitaba una pasantía, y él me dijo: ‘bueno, aquí solo hay algo en producción, hoy es miércoles… venga el lunes’. El lunes llegué a primera hora, pero resulta que la periodista que le tocaba ir a cubrir el famoso Almuerzo Corripio no podía ir y no había periodistas disponibles, y Febles me dice: ‘¿usted quiere ir?’. Yo no tenía idea de qué iba a hacer, mas que preguntar como veía en la televisión, pero dije que sí.

Me tocó cubrir el almuerzo, que era con el actual presidente Luis Abinader. Yo me atreví a hacer una pregunta, ¡y esa fue la noticia del día!… Mi nota salió en el estelar. A la semana siguiente, se abrió una vacante en el programa ‘Periodista por un Año’, en el mismo canal, me dieron la oportunidad, y esa fue la escuelita.

Luego de un año en Telesistema, terminé la Universidad. El mismo día de la graduación me ofrecieron trabajo como periodista en AN7, Antena Latina. Allí estuve por tres años, de ahí me fui a trabajar en el área de comunicación del Consejo Nacional para el Cambio Climático. Poco a poco, como también me interesaba trabajar con temas de turismo, ‘mi pasión’, me ofrecí a desempeñar tareas como técnico en turismo y cambio climático y, paralelo a eso, producía y presentaba el programa especializado de turismo ‘Tierra Caribe’, en el canal 33… Así empezó todo.

En fin, estuve en televisión por seis años, fui adentrándome en el mundo de las consultorías de proyectos vinculados al turismo, pero con especial enfoque en medio ambiente. Luego, Instagram llegó a mi vida y lo demás es historia”.  

¿En qué momento tomaste la decisión de dejar todo y vivir de lo que te gusta?

“Sentía que lo que estaba haciendo no me llenaba del todo, que faltaba algo y que la comunicación, aunque me gustaba, no me estaba permitiendo hacer todo lo que quería. Siento que el periodismo puro y duro en República Dominicana es siempre lo mismo, pero con otros actores y si quería hacer algo diferente, tenía que buscarlo”.

Eres una defensora de los recursos naturales. ¿cómo nació en ti el amor por el medio ambiente?

“Siendo periodista. Siempre trataba de hacer reportajes vinculados al medio ambiente. Producto de eso, en 2015 recibí el Premio Nacional de Periodismo para Cambio Climático, y tuve la oportunidad de viajar a París y ser parte de la firma del acuerdo mundial por el cambio climático. Ese momento marcó un antes y un después en mi vida; me abrió la mente, empecé a ver qué podía hacer más de lo que pensaba y llegué al país con la determinación de aportar en causas ambientales”. 

TURISMO SOSTENIBLE

Miosotis, a través de tus redes sociales muestras formas de hacer turismo sostenible. ¿Qué hace falta para que el turismo comunitario y sostenible sea masivo en República Dominicana?

“Falta voluntad política en apoyar a que las comunidades puedan desarrollarse y tener infraestructura para que aumente su capacidad de recibir turistas. Claro, siempre controlando la capacidad de carga, y cuidando que el impacto de más personas no sea negativo”. 

Cuando viajas a conocer diversas comunidades, ¿qué experiencias traes contigo?

“Tengo familia en las 32 provincias y lo que más me llena de viajar de la forma en que lo hago, es la gente buena y valiosa que encuentro en el camino”.  

Te vemos viajando en un vehículo eléctrico. ¿Cuéntanos tu experiencia de viajar con este vehículo?

“Chocolate (así llama a su carro) ha cruzado el peaje a lugares no muy lejanos, como Boca Chica, Sierra Priera y Santiago. Porque su autonomía no es mucha y no aguanta montes… (Risas). Necesita carreteras en buenas condiciones y, además, no hay sistema de carga en todos lados. Pero, es cool sentir que andas sin un mofle botando humo. Pero para las aventuras extremas, sigo pidiéndole la jeep prestado a mi esposo… (Risas)”. 

¿Qué se necesita llevar consigo para viajar de forma sostenible y sin dañar el medio ambiente?

“Es una larga lista, pero empecemos por lo básico: llevar siempre un vaso, una cuchara, un plato y termo de agua, ya que de esa forma evitas el plástico de un solo uso. Creo que con eso una persona aporta bastante. Si necesitas comprar jugo, ten la valentía de pedirlo en tu vaso y evita el foam”.  

Tú comenzaste a visitar charcos y playas sin saber nadar. ¿Cómo fue ese proceso de aprendizaje para ti?

“Mi compañero perfecto era un churro flotador y un chaleco salva vida. Yo, mas de no saber nadar, tenía un trauma porque a los 15 años casi me ahogo. En 2020, tomé la decisión de tomar clases. Fui por tres meses y para finales de año ya me estaba certificando como buzo”.  

TINGLAR, LA AGENCIA

¿Cómo surgió Tinglar, la agencia?

“Yo quería trabajar en turismo, medio ambiente y comunicación, entonces, la única opción era fundar mi empresa. Así surgió
@Tinglarr Consulting Agency, donde desarrollamos proyectos de medio ambiente y turismo sostenible, asesorías, educación, comunicación, gestionamos @tinglarecostore y editamos @revistatinglar”. 

¿Cómo surgió Tinglar, la revista?

“Quería educar sobre medio ambiente y turismo, pero en un medio tradicional no podía hacerlo todos los días, así que le di vida a mi propio medio, mi revista Tinglar”. 

¿Cómo nació Tinglar Eco Store?

“Era la última patita de la empresa y, en 2020, a través de Instagram, conocí a @yohanature. Ambos trabajábamos en temas ambientales desde nuestros proyectos, pero decidimos seguir juntos por un solo camino, fortalecer la marca Tinglar y darle vida a Tinglar Eco Store, una tienda enfocada en la preservación de la biodiversidad a través del consumo responsable.

El espacio promueve que los dominicanos puedan hacer un cambio de hábitos a productos que tengan un menor impacto en el planeta, yendo de a poco con la ideología de que #unaaccióncuenta”. 

¿Qué podemos encontrar en Tinglar Eco Store?

“Productos ecológicos y la temática de compra a granel. En la tienda, encontrarás que el 90 % de los productos son de producción local. Tenemos elementos extranjeros porque no se fabrican aquí”.  

¿Dónde se encuentra Tinglar Eco Store y qué planes de expansión tienes?

“Estamos a un clic de tu celular o computadora en www.tinglarecostore.com, con delivery disponible, y nuestra tienda física está en la calle El Vergel #21, pero por google map o waze te llevan directo… Pronto viene una nueva sucursal, en una provincia especial, así es que estén pendientes a nuestras redes sociales”. 

MIOSOTIS, LA INFLUENCER

Miosotis, ¿Cómo fueron tus comienzos en Instagram?

“Empecé a documentar mis experiencias de viaje en 2015, producto de mi viaje a París. Compartía lo que estaba pasando en la convención de cambio climático, a la gente le gustaba y me hacia preguntas, así que de forma orgánica fue pasando y hoy se ha convertido en un medio de inspiración, educación y el complemento de mi emprendimiento”.  

¿Qué te inspiró a dedicarte a trabajar tus redes?

“La necesidad de mostrar lo lindo que encuentro viajando, porque no me lo quiero quedar para mí. Me gusta que los demás lo disfruten. Además, lo veo como una herramienta de llevar mi mensaje de que la gente cuide los recursos y solo puede hacerlo si los conoce”. 

¿Se puede vivir de las redes sociales?

“Sí, totalmente, pero soy de las que cree que hay que complementar y expandir, porque las plataformas son momentáneas: primero, hi5, luego Facebook, ahora Instagram y Tik Tok le hace la competencia… Entonces, no se pueden tener todos los huevos en una canasta”.  

¿Qué te gusta y qué no te gusta de las redes sociales?

“Pues es una comunidad genial para conectar con personas y hacer amigos. Puedo decir que la mayoría de buenos amigos que tengo actualmente los he conocido por esta vía. Es genial para comercializar mi negocio y conectar con otros proyectos. 

No me gusta encontrar contenidos sin valor, inmorales, que aunque tengan un mayor rating, no sirven… siento que cada día es peor”.