Olga Diná Llaverías: “Todo ciudadano tiene la obligación de proteger los derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes”

Olga es una profesional del derecho con más de 22 años de experiencia práctica en Derecho Penal, y más de 16 años en el Ministerio Público de República Dominicana. 

Pero hoy, además de ser Procuradora General de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, tiene un rol muy importante para el futuro del país, ya que es la Directora de la Dirección Nacional Niños, Niñas y Adolescentes, órgano encargado de coordinar todas las acciones del Ministerio Público en dicha materia, siendo un ente de enlace y coordinación a nivel nacional. 

Para conocer más la labor de Olga Diná Llaverías, revista CONTACTO la entrevistó en en THRIVE, Coworking and Flexible Office Space, ubicado en el piso 23 de Blue Mall.

Olga, desde hace dos años diriges la Dirección Nacional de Niños, Niñas y Adolescentes y Familia. ¿Cómo ha sido esta experiencia?

“Estar en esta dirección es un reto, porque es la población que más necesita. Es la población menos vista. Es la población menos atendida. El nivel de la infancia es fundamental, y si nosotros no tenemos una primera infancia fortalecida, el desarrollo que viene posterior a esa infancia, de 0 a 5 años, pues va a marcar una diferencia importante.

Es una materia que enamora, que atrae, pero al mismo tiempo es un reto. Aquí hay un desconocimiento generalizado de cuáles son los instrumentos legales que rigen la materia de protección de derechos fundamentales de niños y adolescentes y, evidentemente, ante este desconocimiento, la focalización de recursos siempre ha sido muy tímida. Para poder atender a esta población se necesita recursos, aparte del amor, la vocación y la entrega. Se hace el trabajo, pero contamos con pocos recursos humanos, entrenados de manera adecuada, y con limitados recursos materiales necesarios para poder hacer un abordaje necesario en la prevención y en la atención; en persecución y en sanción; en erradicación y en reparación, pues evidentemente pudiéramos tener una situación actual diferente en estos temas si tuviésemos mayores recursos”.    

¿La población también debe ayudar a este problema?

“Todo ciudadano y ciudadana, no importa su condición social, tiene la obligación de proteger los derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes. ¿Por qué? Porque yo veo a veces publicaciones que dicen: ‘Qué va a esperar x institución para proteger a este niño que está en la calle’… Eso no debe de ser así, es una responsabilidad de todo el mundo. Evidentemente, las instituciones tienen responsabilidades establecidas, compromisos que debemos cumplir, pero la ley establece responsabilidad a cargo de la familia y la sociedad también. Todos debemos ser responsables, denunciar abusos contra niños, niñas y adolescentes. Como dice el artículo 14, de la ley 136-03, las personas que solo sospechen de derechos fundamentales, tienen que notificarlo a la autoridad competente para que inmediatamente se adopten las medidas de lugar. Entonces, el ciudadano, solo con notificar, ya está haciendo su parte. Está cumpliendo con su deber como ciudadano… Sin embargo, siempre estamos viendo en periódicos o en televisión a familias, padres, familiares, que maltratan a sus hijos, y la gente dice: ‘se lo buscó’, que ‘el muchachito es insoportable’, ‘que no lo aguanto’, ‘que es un malcriado’… y eso no está bien, ¡No denuncian! Todos debemos aportar, para formar niños distintos, con inclusión, con derechos humanos, de respeto, con amor”.

¿Cuál es la realidad hoy del trabajo juvenil en el país?

“El maltrato infantil, el mismo CONANI, en años anteriores, reflejó una estadística que por encima del 67 % de los hogares en República Dominicana se utiliza la disciplina violenta. Aquí falta mucha educación en este tema, formar a las familias. Decirles que aquí hay una ley, que constituye un delito las disciplinas violentas, tienen agravantes penales, cárcel, aquellas personas que incurren en esos delitos de violencia contra niños, niñas y adolescentes. Pero lo que ocurre aquí en el país, es que muchas veces la violencia ¡se justifica!… Muchos creen que tienen ¡derechos para maltratar! Dicen: ‘es mi hijo, yo sí puedo hacerlo’… Es horrible la trascendencia que traen estos maltratos, tanto física como psicológicamente. Pero estamos trabajando para reducir estos altos porcentajes de violencia, pero para ello, necesitamos la ayuda de todos para denunciar estos hechos”. 

¿Qué se necesita para mejorar la calidad de vida de los niños y niñas del país?

“Sin recursos es imposible… Hay que entrenar profesionales. Se ha avanzado de manera importante. Por ejemplo, ya tenemos una legislación que prohíbe el matrimonio infantil es un paso gigante. Eso coloca a la niñez y adolescencia en una posición diferente. Se visibiliza distinto el futuro. Pero los entrenamientos de lo equipos que trabajan estas materias son fundamentales, necesitamos gente muy bien preparada, y en ese camino estamos”. 

¿En qué etapa de la vida se encuentra hoy Olga Diná Llaverías?

“Aprendiendo, conociendo…. Cada día aprendemos más, cada día maduramos más. Yo creo que vamos por buen camino, como sociedad, y eso me reconforta mucho. Yo soy una persona muy creyente, que quiero un país mejor, niños mejores, adolescentes mejores, mujeres mejores, hombres mejores… Soy una agradecida de Dios por vivir en mi tierra y trabajar para ella. Me esfuerzo diariamente por mejorar, estudiar más y entregarme en equipo, que tengo un equipo maravilloso, que son mi real soporte para poder trabajar adecuadamente”.

dos mujeres liderando la justicia

¿Cómo se encuentra hoy la justicia dominicana, con una Procuradora y Fiscal mujeres?

“Es una alegría inmensa, es de esas alegrías que uno no sabe cómo explicar. Es esperanza, es como esa sonrisa que uno no puede disimular. Es una alegría que sale del corazón. Es confianza, ya que al conocerlas, sé que el corazón está presente en cada paso que dan las dos. Particularmente, a Yeni, venimos trabajando juntas desde el año 2004, ya son 17 años trabajando juntas. A Yeni la admiro y valoro como mujer, como profesional, y como compañera de trabajo. Conozco su pasión, conozco su amor por el Ministerio Público, cómo se desgarra por esta carrera. Esa sola pasión que la caracteriza a ella es una garantía de que paso que ella dé es un paso de confianza. Y lo mismo con la magistrada Miriam, que es una batalladora incansable de toda la vida. Viene escalando dentro de la carrera pública, en el ámbito legal, desde los estratos más bajos. La magistrada Miriam ha cumplido con todos los procesos del ascenso, que le permiten a ella tener un conocimiento total y absoluto de lo que es la justicia. Llegar con su amor y su forma tan linda de ser a ejercer una función tan demandante, retadora, con tanta entrega, compromiso y responsabilidad, es algo que a cada mujer y cada hombre del país tiene que llenarle de alegría y de orgullo”.    

LA MUJER DOMINICANA

Olga, ¿Cuál crees que es el rol actual de mujer dominicana en la justicia?

“La mujer dominicana tiene retos muy importantes. Tenemos muchos pasos avanzados y reivindicaciones alcanzadas. La mujer ha ido posicionándose de una manera sutil, simplemente demostrando la capacidad que tiene para poder ostentar roles que históricamente, y lamentablemente, no eran para mujeres. Pero hoy, la mujer se ha ido colocando en escenarios en donde no era bien vista. Hoy ya no es así. La mujer puede jugar cualquier rol, en cualquier actividad. A mi me ocurrió, personalmente, que la gente venía al despacho y me encontraba a mi, y yo les decía: ‘pase’, y ellos me decían: ‘no, estoy buscando al fiscal…”. Y yo les decía: ‘soy yo, pase, que lo atenderé inmediatamente’… ¡siempre me ocurría eso! La gente pensaba que el fiscal siempre tenía que ser un hombre y ya no es así. Todo ha ido cambiando, y creo que la mujer dominicana tiene un gran futuro, con más oportunidades. Hoy tenemos más senadoras, procuradoras, juezas, vicepresidenta de la República… Estamos avanzando, falta mucho, pero avanzamos. Nos hemos posicionado
muy bien”.