PROGRENTIS: El “gimnasio de la mente” llega a RD

La plataforma digital educativa Progrentis ofrece una propuesta para acelerar la transformación del sector educativo, apoyar a los docentes y dotar a los estudiantes de competencias más robustas para enfrentarse a las exigencias de la era digital. 

El Grupo Mentora Progrentis presentó a educadores dominicanos esta plataforma tecnológica que contribuye a combatir los desafíos que enfrenta la niñez y juventud a nivel global, tales como la alta tasa de analfabetización digital, los bajos niveles de atención y concentración, la fuerte intoxicación informativa, la pobre comprensión lectora y la crisis provocada por el síndrome multitareas; además de fomentar otras habilidades claves, como son la capacidad de trabajar en colaborativo, aprender a aprender, el pensamiento creativo, la orientación a la solución de problemas y la criticidad, entre otras. 

El embajador de España ante el Parlamento Mundial de la Educación, Dr. Emilio Torres, afirma que los maestros están empeñados en mejorar su método de enseñanza y esto no es lo más importante, sino la manera en que aprende cada niño. 

“Es importante mejorar el aprendizaje de los niños; no que memoricen el contenido; no que sean más disciplinados en el salón; no que rellenen más espacios en blanco en el cuadernillo. Me refiero en qué manera están trabajando para mejorar las oportunidades reales de cada uno de los niños: el aprendizaje. Todo lo demás es un modelo de enseñanza que si no lleva el aprendizaje individualizado de cada uno de los alumnos, están haciendo un tremendo esfuerzo en vano”, asegura Torres, entrevistado por revista CONTACTO. 

Para este educador español, el ánimo de los maestros es muy importante al momento de provocar el aprendizaje en sus alumnos.

“Yo tenía un amigo que decía que ‘el activo más importante de una sociedad es el ánimo de sus maestros’. No son los salones, no es la tecnología, no es el proyector: es la manera en que se está llevando a cabo esas relaciones. Como decía San Juan Bosco: ‘Ya no es tan importante la asignatura, sino los alumnos, en función de lo que haces para generar aprendizaje’”. 

En consecuencia, Torres señala una serie de factores que deben tomarse en cuenta en la revolución educativa de una escuela. 

La pedagogía: 

“Hace más de 150 años que venimos hablando de pedagogía, según métodos educativos antiguos. Somos el gremio que menos investiga, que menos se actualiza. Yo he visto escuelas que siguen haciendo lo mismo de hace 40 años. Todavía hay salones de clases con profesores frente a un pizarrón, con los niños sentados en línea, donde el proceso de aprendizaje pasa únicamente por la repetición del contenido, en pleno siglo XXI. Tenemos que entender que un niño no aprende porque un profesor dicte contenido desde un pizarrón”.  

Psicología: 

“¿Saben lo que estudia la psicología moderna?: la conducta del ser humano. La conducta del ser humano funciona en cómo pensamos. Por ello, les pregunto: ‘¿Los niños de hoy se comportan igual a los niños de hace 10 años?’ No, pues han cambiado su conducta. ¿Saben por qué? Porque hay cambios en su psicología humana y, ¿saben por qué? Porque piensan diferente, procesan diferente… la tecnología los cambió. Nos comunicamos, nos divertimos y nuestro ocio es completamente diferente al de hace 10 años. Por eso, tenemos que ver cómo estamos renovando nuestros procesos, aprendiendo también de la psicología del ser humano, que es diferente”.  

La teoría de la neurociencia: 

“En los últimos siete años hemos estado comenzando a recibir los informes concluyentes diciendo que el cerebro aprende de la experiencia, desde los procesos cognitivos de orden superior. ¿Los profesores saben cómo funciona el motor del aprendizaje? Esto es fundamental, porque no podemos generar aprendizaje sin saber cómo funciona”.  

“Yo tengo profesores en la escuela que podría grabarlos. Los cuelgo en YouTube y tendría un profesor para 30 años, porque todos los años es lo mismo. Si el mundo en el que vivimos ha cambiado, ¿por qué no cambiamos los paradigmas de la educación? Ahora tenemos niños observadores de su proceso de aprendizaje”, afirma el también director de escuela en Madrid.

El proceso de aprendizaje 

Torres califica como un error el proceso de aprendizaje actual, ya que asegura que cuando un niño se equivoca está aprendiendo. 

“Entonces, profesores: ¡A la basura el bolígrafo rojo! Cambiar la escuela no significa cambiar un libro de texto por una tableta; cambiamos desde nuestro interior, no se puede cambiar si los maestros no cambian”.  

La idea de Progrentis, a juicio de Torres, es que se vean los procesos de enseñanza de manera diferente, no a través de los contenidos, sino de las habilidades y de las destrezas. Por eso, sugiere que debe haber un proyecto educativo.  

“El sistema educativo se ideó en el siglo XIX por los Victorianos, qué bien lo hicieron, que dos siglos después sigue permaneciendo. Un sistema educativo creado por personas de aquella época, liderado hoy en día por nosotros, que somos del siglo XX, educando a niños para el siglo XXI. La reflexión que traigo es que piensen hacia dónde van como escuela”. 

La llegada de Progrentis al país trae una solución al sistema educativo, según explica el experto, ya que trae implícitamente otros beneficios, tales como “actualización profesional docente, introducción de nuevas metodologías en el aula y alfabetización tecnológica; todas claves para dar un salto cualitativo en la calidad de la educación”.  

“Hay profesores a los que no les puedes hablar de innovación porque te dicen que tienen 30 años de experiencia. ¡Y no es así!… él tiene un año de experiencia que ha replicado 30 veces, 30 años haciendo lo mismo”.

Evaluación de los estudiantes

Dime cómo evalúas y te diré cómo enseñas, afirma Torres. 

“Tenemos escuelas donde a los niños durante 15 días la información es dictada a todos por igual, como están agrupados en el salón por fecha de fabricación, todos los nacidos en el 2010, todos en el mismo salón, todos tienen que aprender lo mismo en el mismo tiempo… de la misma manera, con un único estilo de enseñanza, independientemente de cómo ellos aprendan y después de 15 días se comprueba la calidad del producto con un examen. El mismo examen para los mismos 25 niños, con las mismas 10 preguntas, con los mismos criterios de calificación”.  

Lo que Torres trata de alertar a los maestros dominicanos es que todos los niños no aprenden de la misma manera, por lo tanto, no pueden ser evaluados todos por igual.  

Dice que una forma de medir la forma en que estaban enseñando a los niños fue con un experimento, ya que ellos prepararon a los niños en un tema durante una semana. Luego, a la semana siguiente, se les dio un examen sobre ese tema y aprobaron el 75 % de los alumnos del salón. A la semana siguiente, se les dio el mismo examen, pero de forma sorpresa, y solo un poco más del 50 % aprobó el examen. Tres meses después, se les dio el mismo examen, con las mismas preguntas, y solo el 25 % lo aprobó.  

“Un examen no mide el aprendizaje, mide la memoria a corto plazo, mide la manera en que un niño instrumentaliza el aprendizaje. ¿Qué ocurre cuando este niño se va de vacaciones en junio y regresa a la escuela en agosto? El profesor tiene que comenzar de cero a trabajar el mismo tema que se les dio el año anterior. ¿Saben por qué? Porque tenemos que trabajar entendiendo que cada niño tiene un perfil de aprendizaje”.

Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad

El Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un trastorno neurobiológico originado en la infancia que implica un patrón de déficit de atención, hiperactividad y/o impulsividad, y que en muchas ocasiones está asociado con otros trastornos, según expertos.  

Hoy en día es muy común escuchar a los maestros hablar de TDAH, sobre todo en aquellos niños que no se pueden estar tranquilos, no se sientan y llaman a la madre todas las semanas, explica Torres. 

“Y se pasan regañando al niño en la escuela y regañando al niño en la casa. De repente, un día llega el niño a la escuela y ni se mueve, parece un zombie, tranquilito, no molesta. ¿Saben por qué? porque la mamá se lo llevó para un neurólogo, porque la escuela no le daba solución, y le recetaron pastillas”.  

Según el educador, en España hay un incremento de un 23 % de niños que dicen que tienen Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, un 32 % de incremento de uso de fármacos y ansiolíticos para trabajar el TDAH, “porque cuando el modelo de enseñanza no consigue que un niño esté sentado en su silla durante 6 horas escuchando a un profesor dictando contenido, entonces el niño tiene TDAH”. 

De la misma forma, Torres afirma que al final se está provocando daños en el desarrollo evolutivo de un niño. 

“De los cuales no somos conscientes, pero como somos los adultos, estamos mal diagnosticando a más de un 18 % de los niños con TDAH. Esto es muy grave, todo porque hay escuelas que no quieren cambiar, todo porque hay niños en la escuela que tienen un perfil diferente y los profesores no son capaces de adaptarse a la manera en que aprenden los niños”.  

El maestro español aclara que esto no se da en todos los casos, ya que sí hay niños con TDAH. 

“Claro que sí hay niños con dificultades, siempre los ha habido, pero el problema porque el niño no aprende no puede ser siempre un trastorno para él, a lo mejor el trastorno lo tiene la escuela”. 

Incluso, señala que no se puede seguir hablando de igualdad en la escuela, porque es una falacia. 

“No tienen derechos a ser todos iguales, tienen derecho a ser todos diferentes, porque los niños estén agrupados por fecha de nacimiento y en el mismo salón, no significa que vayan a poder aprender lo mismo, es imposible pensar eso”.

La propuesta de Progrentis Mentora

La propuesta del Grupo Mentora es usar el sistema que ellos ofrecen en el que prometen resaltar la capacidad de atenciones de los niños, que en la actualidad está reducida a los ocho segundos. Además, con su programa de trabajo, aseguran que trabajan en la construcción del pensamiento crítico, desarrollo de competencias, habilidades y destrezas. 

“El principal problema tiene que ver con la capacidad atencional de los niños que se ha reducido a los ocho segundos. Si le sumamos el Síndrome del Multitareas, o de hacer varias cosas a la vez y, reduce el nivel de concentración”, explica Andrea Vega, directora regional de Mercadeo y Comunicación Corporativa del Grupo Mentora. 

A esto, se suma el problema de compresión lectora que tienen los niños y adolescentes en América Latina, lo que califican como el verdadero talón de Aquiles. 

“Y la solución propone complementar el proceso educativo con una hora de entrenamiento cerebral a realizarse en el aula mediante retos grupales e individuales neurovisuales”, culmina Vega.