Servio Tulio Castaños Guzmán, Vicepresidente ejecutivo de FINJUS: “FINJUS es una institución grandiosa. No protesta, hace propuestas”

El Vicepresidente Ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) conversa a fondo en nuestra sección Business From Cappuccino: del código penal, la transformación de la Policía, del Poder Judicial, del Ministerio Público y la labor de la Procuradora Miriam Germán Brito y los fiscales Yenni Berenice Reynoso y Wilson Camacho en su primer año. También, el abogado nos cuenta la actualidad de la FINJUS, y la relación que mantiene con sus cinco hermanos, una familia que se convirtió en uno de los linaje más tradicionales de República Dominicana, comandados por sus padres, el Dr. Julio César Castaños Espaillat y la Dra. Nervina Guzmán.

Cuando uno ve y escucha hablar a Servio Tulio Castaños Guzmán por televisión, la primera impresión podría ser que es una persona enérgica, segura de sí mismo y con gran dominio de los temas legales y de justicia. Sin embargo, quizás pocos saben que Servio es muy sensible, que se emociona con facilidad, y que es una persona con mucha humanidad y humildad. 

  Servio hoy es, además, un ferviente seguir de Dios, que todos los martes se reúne junto a su grupo de oración y oran por dos horas.

Conversar con el hermano menor de la familia Castaños Guzmán es un deleite. Junto a uno de sus amigos de toda la vida, Claudio Paccagnella, propietario del restaurante IL Cappuccino, revista CONTACTO conversó con Servio Tulio para la sección Business From Cappuccino, en un almuerzo que se extendió por más de dos horas, sin darnos cuenta de los minutos, luego de dialogar sobre diversos temas de la actualidad en el país.

CÓDIGO PENAL

Servio, hoy, el tema del momento es el proyecto de ley del Código Penal. ¿Cuál es la posición de FINJUS ante este proyecto?

“En primer orden, consideramos importante reconocer el esfuerzo que se ha venido realizando en el seno del Congreso en la ardua labor de redacción y discusión de esta importante pieza legislativa. Desde el inicio, FINJUS ha acompañado la labor legislativa concerniente a los trabajos de reforma del Código Penal, entendiendo que se trata de una normativa indispensable para la consecución de una política criminal verdaderamente efectiva al momento de enfrentar las novedosas formas y esquemas delincuenciales.

Ahora bien, a pesar de que el proyecto de Código Penal, que actualmente se discute, representa un gran avance respecto del Código vigente, en razón de que contiene aspectos sustanciales que afinan aspectos interesantes para el entramado jurídico penal, de los cuales podemos mencionar: la responsabilidad penal de las personas jurídicas, el cúmulo de penas; la definición de infracciones graves contra el patrimonio público, esto es el enriquecimiento ilícito, el cohecho de funcionarios y auxiliares de justicia; el pago irregular de contratos administrativos, la sobrevaloración, entre otros; así también, otros tipos penales como el sicariato, feminicidio, la tortura, la violencia sexual, daños con sustancias químicas, etc.; no debe dejarse de lado la necesidad de ponderar y analizar cuestiones importantes que, en el discurrir del proceso legislativo, han sido añadidas a esta pieza, desvirtuando incluso presupuestos constitucionales y otros propios de la dogmática penal; las cuales han sido señaladas a propósito de la conformación de la comisión de estudio de este proyecto en el Senado de la República”. 

¿Qué opinas de las divergencias que han ocurrido hasta ahora en la cámara alta, luego de la rápida aprobación en la Cámara de Diputados?

“El diseño institucional dominicano prevé un Congreso bicameral conformado por la Cámara de Diputados y el Senado de la República, la lógica misma del sistema bicameral es que permite el ejercicio de un sistema de pesos y contrapesos al interior del Congreso, que cada cámara tenga divergencias contrae consecuencias de primer orden desde la perspectiva del fortalecimiento constitucional, especialmente en lo que tiene que ver con su incidencia en las formas de representación democrática y el balance de poderes entre las cámaras legislativas. Por un lado, la lógica del Senado es que este opere como una cámara de reflexión o enfriamiento en la que se pueda mejorar técnicamente las iniciativas legislativas y amortiguar, en su caso, las tensiones políticas acumuladas en la Cámara de Diputados, desempeñando de este modo una función tradicional de contrapeso”. 

¿Cómo se debería impulsar un amplio diálogo con la comunidad jurídica, la academia y toda la sociedad sobre este tema?

“Resulta importante entender que la creación legislativa refiere a un constante proceso de interacción que debe darse no solo a lo interno del Congreso, sino también con los distintos actores e instituciones, la comunidad jurídica y la sociedad en general. Debe recordarse que, si bien son nuestros representantes quienes tienen la potestad de aprobación de la norma, tal y como refiere la doctrina, “(…) el proceso de legislación tiene como objetivo alcanzar decisiones racionales siguiendo un procedimiento institucionalizado”,  el cual debe construirse y evaluarse incorporando al enfoque jurídico una perspectiva social amplia.

Se debe impulsar un amplio diálogo sobre el proyecto de Código Penal a través de los espacios de vistas públicas entre los entes interesados, esto es Ministerio Público, Suprema Corte de Justicia, las universidades, entes gremiales y la población en general, esperamos, pues, que este intercambio sea fructífero y coadyuve en el fortalecimiento de la actividad legislativa, la concertación social debe dar lugar a importantes aportes, resultando en una norma técnicamente adecuada, socialmente consensuada y políticamente responsable”.

TRANSFORMACIÓN DE LA POLICÍA

Servio, tú eres el presidente del grupo de trabajo para la transformación de la Policía. ¿Cómo va esa reforma policial, en qué etapa se encuentra?

“En primer orden, apuntar que ha sido una ardua labor la que ha venido realizando este grupo de trabajo para la transformación y profesionalización de la Policía Nacional, estamos hablando de 21 ciudadanos representativos de diversos sectores sociales que se han enfocado en crear un equipo de trabajo multidisciplinario para asumir la ardua tarea de recomendar políticas públicas que contribuyan al fortalecimiento de la institución y, consecuentemente, al mejoramiento del clima de seguridad ciudadana.

Sobre la etapa en la que nos encontramos inmersos trabajando señalamos que han sido realizados amplios procesos diagnósticos dentro de la institución, dentro de los cuales resalta el informe de evaluación remitido por Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito que contiene elementos esenciales para direccionar la reforma policial a corto plazo. Así también, se ha requerido del Consejo Superior Policial y la Dirección General de la Policía Nacional una amplia documentación respecto de los reglamentos, manuales y procedimientos de la institución. De esto último, señalar la intervención de este grupo de trabajo en la elaboración y adecuación de los reglamentos necesarios para hacer operativa la ley 590-16, dentro de estos el reglamento de aplicación de la ley, el de comisiones independientes, el del uso de la fuerza, el reglamento disciplinario, entre otros.

De igual manera, hemos solicitado a la Cámara de Cuentas realizar una auditoría externa, en su calidad de rector del sistema de control externo, respecto de los procesos de gestión y procedimientos de control interno de la Policía Nacional. Se ha pedido también al Ministerio de Administración Publica su colaboración en el análisis de la estructura salarial de la institución policial y su escalafón. También se procedió a solicitar la integración de una comisión independiente para acompañar y dar seguimiento a los casos disciplinarios pendientes en la Policía Nacional.

Finalmente, estamos concentrados creando los espacios y herramientas que faciliten el intercambio y retroalimentación constante entre el Grupo de Trabajo, los actores del sistema, la institución policial y la sociedad, a fin de contribuir en el incremento de la confianza social, la competencia profesional, y la eficiencia en su accionar, siempre apegados a sus atribuciones constitucionales y legales”. 

¿Cuál es el plazo que tiene esta mesa para culminar con las recomendaciones para la transformación de la policía?

“En virtud del párrafo II del artículo 1, del decreto 211-21 que creó el Grupo de trabajo para la transformación y profesionalización de la Policía Nacional, se estableció plazo de un año calendario a los fines de cumplir con los objetivos indicados en el artículo 3 del mismo decreto; dejando la posibilidad de una extensión si fuere necesario bajo criterios de razonabilidad”.

LA JUSTICIA

Servio, se está cumpliendo un año del gobierno del Presidente Luis Abinader. ¿Cómo has visto el rol y el manejo del Poder Judicial durante este primer año?

“En primer orden resulta necesario resaltar que, en razón de la propia naturaleza autónoma del Poder Judicial, los criterios de valoración varían; no se trata de una especie de gestión con ejecuciones comprobables que pueda mostrarse con periodicidad anual, sino que responde a una diversidad de aspectos que deben considerarse.

Lo importante es enfocar que la idea de un Estado de Derecho requiere de un Poder Judicial que garantice un sistema de justicia que sea accesible, eficiente, imparcial e independiente y, de igual manera, una justicia oportuna, inclusiva, accesible y confiable, garante de la dignidad y los derechos de las personas, para con ello proteger los derechos esenciales de los ciudadanos y mantener el orden social”. 

¿Cuál es tu opinión sobre la gestión de la Procuradora General de la República, Miriam Germán Brito?

“Desde la sociedad fue visto con agrado la designación de la procuradora general de la República, Miriam Germán, en razón de la escogencia de una figura sin vinculación política que permite alejar recelos con relación a la materialización del criterio de independencia funcional en este órgano que reviste una importancia capital en todo el sistema de justicia.

Lo que se ha observado de este órgano responde de manera adecuada a su misión constitucional, afianzando el mandato de garantizar los derechos fundamentales de las personas, de defender el interés público tutelado por la ley, y hacer efectivos los derechos y garantías consignados en defensa de la sociedad de acuerdo a los límites que impone el mandato constitucional, con ello, se ha evidenciado la existencia de un ambiente de reconocimiento y respeto de las reglas propias del Estado de derecho para asegurar la calidad y legitimidad del órgano y de la vida democrática en sentido general”. 

¿Te ha sorprendido la labor de
persecución que han llevado a cabo los fiscales Yenni Berenice Reynoso y Wilson Camacho?   

“Consideramos que se trata de profesionales con perfiles idóneos para el desempeño de las funciones que les han sido asignadas. Debe destacarse que cada uno de los actores del Ministerio Público está jugando el rol que le corresponde en virtud de los presupuestos constitucionales”. 

¿Qué te pareció lo ocurrido con la anterior Cámara de Cuentas, que, al parecer, era una “Cámara de Cuentos”?

“A propósito de las actuaciones realizadas por el Ministerio Público en seguimiento a la investigación que cursa sobre los miembros de la Cámara de Cuentas por, alegadamente, obstrucción de la justicia y entorpecimiento de indagatorias sobre corrupción en instituciones estatales, conviene recordar el contenido del artículo 12 de la Ley 133-11 Orgánica del Ministerio Público que establece que este órgano, podrá requerir la colaboración de cualquier funcionario o autoridad de la República para el cumplimiento de sus funciones, quienes están obligados a prestarla sin demora y suministrar las informaciones, documentos e informes que les sean requeridos”. 

¿Cuál crees que es el principal hito en la historia para la justicia dominicana, que un ex Procurador haya sido apresado 11 meses después de abandonar su cargo? 

“Entendemos que el verdadero hito no se circunscribe al hecho de que la persecución penal se encauzara respecto de la figura de un ex procurador, sino que se ha evidenciado un Ministerio Público ejerciendo sus atribuciones con un marcado criterio de imparcialidad que prioriza la objetividad, sin influencias de sesgos, prejuicios o tratos diferenciados por razones inapropiadas en el marco de la persecución del delito”. 

¿Qué falta aún en la justicia
dominicana para seguir avanzando en transparencia, gestión y equidad?

“Dentro de los retos pendientes con relación al sistema de justicia, entendemos que a la fecha debe continuarse fortaleciendo los niveles de independencia, eficiencia, transparencia y previsibilidad de los órganos que interactúan.

Una de las demandas reiteradas que hemos formulado a los  poderes ejecutivo y legislativo responde a la no aplicación de la Ley de Autonomía Presupuestaria del Poder Judicial y el Ministerio Público No. 194-04, manteniendo a las principales instituciones del sistema de justicia en una situación de precariedad, que impide el desarrollo de políticas públicas que aseguren la implementación de la política criminal del Estado y las medidas que facilitan el acceso, eficiencia y gratuidad de la justicia, como ordena la Constitución”. 

FINJUS

Servio, ¿cuéntanos de FINJUS y sus 31 años de vida en el acontecer
dominicano?

“FINJUS es una institución grandiosa. La FINJUS no protesta, hace propuestas. Cada pronunciamiento que se hace desde la Fundación es sobre la base de argumentos, y esos argumentos su naturaleza son estrictamente institucionales. Nuestra visión es el fortalecimiento de la institucionalidad y el fortalecimiento de la justicia en el país. Eso nos ha llevado a que la FINJUS se haya ganado la autoridad de que cada uno de sus pronunciamientos son muy tomados en cuenta por la opinión pública, por las instituciones del Estado, por los empresarios y por múltiples sectores de la sociedad. La FINJUS se ha convertido en un referente, y como Fundación nos sentimos muy orgullosos de haber logrado lo que nunca se pensó lo que sería la institución: partimos como un organismo que sería parte de un proceso y sucedió que perduró en el tiempo, y ya es muy difícil que hoy no se tome en cuenta a la FINJUS”. 

¿Cómo crees que valoran a la FINJUS desde el extranjero?  

“La FINJUS, junto la Fundación Global, han sido ranqueadas internacionalmente, dentro de las 100 Centros de Pensamiento (Think Tank) de toda América Latina. Y también del Centro de Pensamiento de la Universidad de Philadelphia, que es quizás el Centro de Pensamiento más emblemático de Estados Unidos. Eso ha traído que la Fundación conecte con diversas universidades de Estados Unidos, lo mismo con Europa y Sudamérica. Y, también, con casi todas las universidades aquí en el país. Somos consultados por el Congreso, el Ejecutivo, etc.”. 

¿Cómo nace la visión y misión de FINJUS?

“Alejandro Grullón es uno de sus principales fundadores. Un hombre con una extraordinaria visión. Muy visionaria. Él tuvo la idea de fundar la Fundación de Institucionalidad y Justicia junto a un grupo de empresarios y con un grupo de connotados abogados. Por ejemplo, te puedo comentar a representantes del Grupo León Jiménes, el Grupo Mercasid (en ese entonces), Elena Viyella de Paliza, el Grupo Vicini, el Grupo BHD, y los principales grupos del país. Todo esto, partiendo con su primer presidente, el Señor Manuel Bergés Chupany. Uno de los presidentes más emblemáticos que ha tenido la FINJUS, y un gran personaje para este país. Imagínate, que su primer Vicepresidente Ejecutivo fue el actual Presidente del Tribunal Constitucional, Don Milton Ray Guevara. Es decir, desde un principio, se formó una gran Fundación. Uno de nuestros ejes es el estado de derecho, fomentar proyectos y políticas públicas que vayan en esa dirección. Y esos hombres tuvieron esa visión”. 

¿Cuántos años llevas en FINJUS?

“Llevo muchos años en FINJUS. Sé muy bien lo que es esta institución, y los aportes que ha hecho al país. De los 31 años de vida, le he dado muchos años a FINJUS, más de la mitad de su vida, y la siento parte de mi vida profesional y personal. FINJUS ha hecho más de 300 publicaciones en 31 años; miles de artículos de propuestas, de fondo, tratando la dogmática del derecho en todas las vertientes. Esta Fundación es mi segunda casa, mi vida, que le doy más de 8 horas diarias, desde hace 17 años. Para mí lo más grande ha sido la Fundación, de todo lo que he hecho, y todo lo que me ha aportado a mi profesión”. 

¿Cuántos miembros posee hoy
la FINJUS?

“Para el período 2021-2023, el Consejo de Directores está presidido por Rafael A. Del Toro Gómez, acompañado de Elena Viyella de Paliza, primer vicepresidente; Rafael Ernesto Izquierdo, segundo vicepresidente; Anyarlene Bergés, secretaria; Yudith Castillo, vicesecretaria; Gustavo Ariza, tesorero, y Julio Llibre, vicetesorero.

También, fueron electos como directores Carlos Guillermo León, Omar Victoria, Guillermo Estrella, Práxedes J. Castillo, Celso Marranzini Pérez, Robinson Peña, Rafael Blanco Canto, Leonardo Matos, Andrés Bobadilla hijo y Marino Ginebra, en su condición de Pasado Presidente, y Servio Tulio Castaños, Vicepresidente Ejecutivo. También, tenemos 35 miembros asociados, quienes eligen el Consejo del Directorio. En FINJUS trabajamos 18 personas, pero fuera de ella, muchos más”. 

Servio, ¿cómo evalúas este primer año del presidente Luis Abinader?

“Uno tiene que estar consiente que el presidente Abinader está administrando una crisis. Llegó al puesto con muchas deficiencias desde el punto de vista institucional, de sectores ligados a la justicia, y llegó con muchas deficiencias en el mismo Ejecutivo, en donde los órganos de control no funcionaron nunca… Ya vimos cómo terminó el órgano rector, la Cámara de Cuentas. Él debe tomar decisiones muy firme, con una Policía Nacional que se ha convertido en uno de los principales problemas para darle respuesta al tema de la seguridad. Él está tratando de transformar esa institución y se están dando los pasos. Ya vemos lo que hizo con el Ministerio Público, independiente por primera vez, eso ha impactado mucho a ese órgano de una manera descomunal. Tomó una decisión sabia de deslindar su administración con las actuaciones de la cúpula del Ministerio Público. No influenciar políticamente al Ministerio Público, un órgano que históricamente estaba invadido por la política, pero no por un partido, por todos los partidos.  Fue una gran decisión, aunque pagó un precio político, porque cedió a esa práctica… Es decir, un precio positivo, porque él se benefició de todo eso, porque toda la ciudadanía aplaudió la decisión. Lo mismo con la educación, que sigue siendo deficiente, pero se avanzó, y más en una pandemia. Lo mismo que la salud, que a pesar de una pandemia mundial que nadie estaba preparado, se ha salido bien del paso. Igual, hay que esperar, para hacer una evaluación objetiva, porque es solo un año, pero en general, muy bien. Pero también ha cometido desaciertos, como nombrar a funcionarios que no reunían los requisitos que las leyes establecían. Eso se le ha criticado mucho. Pero es un presidente que corrige, escucha a la gente y la sociedad, y eso se valora”.

LA FAMILIA

Servio, tú eres descendiente de una familia de abogados. ¿Qué significa la familia para ti en el desarrollo de tu carrera profesional?

“Mi génesis… Mis padres fueron educadores antes de ser ambos abogados. Mi papá fuer rector de la UASD tres veces y Ministro de Educación; Procurador General, etc., con unos niveles de integridad más allá de la distancia. Mi madre fue una persona extraordinaria también… (se emociona). Mi padre me influenció más que mi mamá en lo que fue mi formación ideológica, aunque los valores de ambos eran los mismos. Mi papá me influenció mucho… (con lágrimas en sus ojos). Hace 35 años que murió mi papá y todavía me emocionó cuando hablo de ellos. Los amaba mucho… Cuando mi padre murió, yo juré que nunca me iba a quitar el luto, y nunca lo he roto ese juramento… siempre tengo mi corbata negra. Pero no como luto, sino como un tributo a él”.    

Eres el menor de seis hermanos, cinco abogados y un médico. ¿Cómo es tu relación con tus hermanos?

“Nosotros somos cuatro hermanos varones y dos mujeres: Julio César, Julio Amado (médico), Julio Miguel, Dilia, Emilia Castaños Guzmán y yo. Pero desde el punto de vista ideológico, todos somos diferentes. Nadie es mejor que nadie y nadie es menos que el otro. Yo sí te puedo decir una cosa: mis mejores ejemplos son mis hermanos, todos. Eso dentro de mí pesa. Nos criaron muy cercanos, con el concepto de la familia. Jamás les faltaría el respeto a uno de mis cinco hermanos, porque yo soy el menor. Pero ellos tampoco nunca me han faltado el respeto, aunque tenemos diferencias de criterio. Nos unen muchos valores, es increíble. Somos muy unidos. Los varones nos juntamos periódicamente”.      

¿Qué hace Servio Tulio Castaños un fin de semana cualquiera junto a toda su familia?

“Eso es tiempo de mi familia. Generalmente, nos vamos los fines de semana fuera de la ciudad, con mis tres hijos. Mis hijos son César Alejandro, de 33 años; María Alejandra, 30 años, y María del Mar, 27 años. Dos son abogados y una economista, graduada en la Universidad de Stanford. Dos de mis hijos son abogados y se formaron en España con Maestrías. Yo adoro a mis tres hijos. Yo aprendo mucho de ellos, constantemente. Ahora, uno de mis sueños es tener un nieto, espero pronto tenerlos… Eso es algo muy importante para mí, porque yo no conocí a mis abuelos”.  

¿Qué significa tu esposa para ti?

“Mi esposa Ivetsy sí que ha visto cosas… (Risas). Llevamos 35 años de casados. Es la que me justifica y me alienta a todas mis proezas. Pero tiene el valor de decirme cuando yo me equivoco, y eso uno lo valora. ‘Servio, esa no fue la manera correcta de haber dicho en ese tono, esa no es la forma’, me dice… Ella es mi fuente inagotable de ternura. Claudio (Paccagnella) lo sabe, que Claudio también es mi gran amigo desde hace muchos años… Ivetsy es una pareja formidable”.   

¿Quién es hoy Servio Tulio Castaños?

“Un ser humano muy sensible… que respeta mucho a los demás y que siempre ha querido ser un buen abogado. Solo he pedido que Dios me deje ver a mis hijos crecer. Nunca he tenido aspiraciones de nada. Soy una persona que quiere que sus nietos sepan quién fue su abuelo y su bisabuelo”. 

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