Yolaine Espinosa: De ingeniera civil a meal planner  

Esta ingeniera civil cambió la mezcla de cemento en una construcción por una mezcla de harina de almendra en un bol. Aunque le gustaba trabajar en obras, la que le robaba el corazón era lo que hacía cada día en su cocina. 

Yolaine Espinosa, con su proyecto Yola´s Healthy Food, se convirtió en una meal planner para aquellas personas que estaban buscando una salida saludable para bajar de peso. Yolaine se encarga de preparar la comida, desde una persona a una familia completa, que deseen llevar una alimentación baja en calorías y carbohidratos.  

Hoy, Yolaine se gana la vida desde su cocina, con una historia que comenzó en un post de Instagram, donde contó su experiencia con la dieta keto, que la llevó a bajar 46 libras en 23 días. 

Yolaine, ¿cómo comenzó tu proyecto Yola’s Healthy Food? 

“Antes de Yola´s, tuve otro proyecto en el que hacía planes nutricionales. Todo comenzó cuando estaba embarazada, hace ocho años y medio. Me certifiqué en Nutrición, porque el doctor me dijo que estaba en sobrepeso y me mandó donde un nutricionista. En medio del llanto, le dije a mi esposo que no iba a ir donde el nutricionista, porque me iba a poner a estudiar todo lo que tuviera que estudiar y al final iba a salir del peso yo sola.

Me certifiqué, tuve mi primer hijo y empecé el primer negocio, que al final lo tuve que dejar por temas laborales. Yo lo que hacía era cocinar de acuerdo a los macros que tenía que consumir cada persona, era muy personalizado. Se te hacía un esquema de peso, grasa muscular y todo, y luego con esa información se hacía los planes de los macros. Yo le pesaba la comida a cada quien antes de enviársela y tuve muchos clientes que bajaron muchísimo de peso. 

Entonces, Yola´s surgió porque ya estaba cansada de contar macros y siempre estar en el mismo sube y baja. En ese tiempo, mi entrenador me decía que hiciera la dieta keto. En ese momento, keto ni siquiera se mencionaba en el país, lo poco que se escuchaba de keto era que no era saludable. Me puse a investigar y no le dije a nadie, y empecé a hacer keto por 30 días. Los primeros 30 días comencé a bajar de peso, pero yo seguía haciendo ejercicio. Yo siempre he hecho crossfit y lo complementé con nadar dos veces a la semana. Cuando vi que bajé tanto, estamos hablando de dos meses y 23 días de dieta, pasé de 174 libras a pesar 128 y después esas 128 se convirtieron en 122”. 

¿Cómo se dio ese proceso en que comenzaste a vender la comida elaborada? 

“Empecé a poner en mis redes como me sentía, era un testimonio lo que había escrito y la gente me comienza a escribir sobre el cambio que tuve al bajar de peso y me pedían que les compartiera cómo lo había hecho. Entonces, comencé a escribir como un diario de lo que hacía y la gente me comenzó a pedir que le vendiera la comida que yo hacía. Recuerdo que empecé con un pan que se hace con queso mozzarella y ese pan empezó a venderse mucho, y llegó un momento en que no podía con el trabajo. En ese momento, dije: ‘la primera vez no brinqué del barco, pero esta vez me voy’. Y renuncié a mi trabajo. No te voy a negar que los primeros tres días, después de dejar el trabajo, estaba en depresión, porque no sabía qué iba a hacer con mi vida. Siempre tuve a mi esposo de backup, que siempre estuvo ahí y me apoyó”. 

En ese momento, ¿qué era lo que estabas haciendo?

“Pan, tortilla y dulces. Los dulces que pensaba que se podían transformar, los transformaba.

Tengo una amiga, que la conocí por Instagram, que ella quería llevar la dieta y me dijo que tenía un primo que trabajaba en Meat Depot. Doña Julia me recibió con los brazos abiertos, en ese supermercado me dijo: ‘tráelo todo’. Después de ahí, la gente de Carne y co. me pidieron los dulces”.

Yola´s en los Supermercados 

Yolaine, Meat Depot fue el primer supermercado que te apoyó. ¿Cómo continuó la evolución de Yola´s?

“Luego me contactó Saralina´s, de Wholesome Kitchen. Comencé a trabajar con ellos, y después de eso, paso a ser influencer del Supermercado Nacional y me pidieron que llevara mis productos. En ese tiempo, yo había desarrollado otra línea que eran los congelados, raviolis y pastelitos, que no tienen nada que envidiarle a los normales. Comenzamos a vender en todos los Supermercados Nacional”.

¿Dónde se puede conseguir la comida que preparas, además de los supermercados?

“En mi página web. Todo se puede pedir a través de la página. Incluso, los congelados y las galletas, a través de www.yolas.do”. 

¿Qué podemos encontrar en tu página web, qué variedad de alimentos?

“Raviolis, tortillas de harina de almendra, pastelitos, empanadas, masa de pizza, panes, galletas que son de queso palmesano. Tengo un menú que se envía listo a las personas que lo piden que cambia cada miércoles, ahí pueden encontrar desde tortillas, raviolis en masa de mascarpone y limón; rap de pollo; taco de pescado; filete de cerdo en salsa de mostaza con puré de cepa de apio, entre muchos alimentos preparados”. 

¿Una familia que decida llevar la dieta keto se puede poner en contacto contigo y tu te encargas de suplirles la alimentación de la semana?

“Sí, yo les ofrezco los almuerzos. Estamos trabajando reducidos con 15 personas, por tema de espacio, mientras conseguimos local. Más adelante podremos ofrecer más, pero ahora solo nos estamos limitando al almuerzo”. 

Tú creaste las recetas para la línea Don Pedro. ¿Cómo se dio esa alianza? 

“La gente de Induveca me llamaron y me dijeron que querían hablar conmigo, fui a sus oficinas y me preguntaron si yo estaba dispuesta a crear un producto. Antes de eso, se aseguraron que yo estuviera preparada con los estudios y certificaciones correspondientes. Comenzamos a ver los productos con lo que podíamos trabajar, qué podía llevar, qué no podía llevar. Luego fuimos a La Vega a sus instalaciones a probar el producto”.  

De ingeniera a meal planner 

Yolaine, eres ingeniera civil y perito en Electrónica en Comunicaciones. ¿Qué hacías al momento que dejaste tu trabajo como ingeniera? 

“Yo supervisaba obras. En ese momento, estaba trabajando en una torre en la Anacaona, que se llama Park Towers”. 

¿Cómo cambió tu vida de estar supervisando obras a dedicarte a la cocina?

“Lo que pasa es que esto (la cocina) siempre ha sido lo mío. La cocina era como el part time para mí. Yo llegaba a mi casa a las 5:00 pm y a esa hora comenzaba a hacerle los meals plan a la gente, y los entregaba en la noche: el desayuno, comida y cena. A mí siempre me ha gustado cocinar. Mi mamá y mi tía tuvieron un negocio de cocina y yo estuve siempre metida en la cocina desde los nueve años”.  

No te consideras influencer, sin embargo, influyes en muchas personas. ¿Qué piensas de la influencia?

“Yo no tengo problemas con la influencia como tal, lo que no me gusta es el fake de la influencia. Considero muy falso recibir un dinero por promover un producto y ni siquiera consumir lo que promueves. Si yo te influyo para bien, lo acepto, pero no quiero recibir un dinero por influirte por cosas que no estoy haciendo. Yo solo he trabajado con marcas o productos en los que sí creo o consumo”.  

¿Con cuáles marcas has trabajado? 

“Trabajé con Nestlé, la parte de una leche de coco, ¡buenísima!, que tienen en polvo que no tiene nada agregado. No se corta, no se pone grumosa cuando la mezclas. Yo no había probado una leche tan buena. Ese producto ellos lo tienen solo para restaurantes. 

Luego trabajé con el Supermercado Nacional: ¡los amo, bastante buenos! No me puedo quejar de cómo me trataron. Cuando empecé con los productos keto, El Nacional comenzó a traer productos keto y, en ese momento, lo que yo hacía era darle un impulso a los productos en los que yo creyera. 

Con la marca Don Pedro, trabajé desde la creación hasta luego un recetario”.  

¿Cómo han ayudado las redes sociales a tu negocio? 

“Todo empezó por las redes sociales. Todo el mundo me conoció a través de ellas, y a través de mi cuenta nació mi negocio”.